El buen trabajo defensivo del Cádiz CF Virgili le concedió un importante triunfo en su visita al Puertollano, donde también quedó patente el poder goleador de los amarillos.
Pese a sólo viajar con dos cambios, el equipo gaditano regresó con tres importantes puntos tras reencontrarse con la victoria. Justo por esos problemas de banquillo, los gaditanos salieron con una defensa muy retrasada, casi en su propia área. Por ello, el debut del portero Zuza no fue tan plácido somo se esperaba y tuvo trabajo desde los primeros minutos del partido.
Cinco minutos tardaron los cadistas en aproximarse a la portería local. Primero Antonio y luego Zequi probaron fortuna mientras el equipo local seguía intentando hincar el diente a la bien posicionada defensa amarilla.
Mediada la primera parte, una contra bien llevada por Miguel la finalizó Antonio con un disparo cruzado. Ante este inesperado 0-1, los locales subieron una marcha su ritmo, pero el resultado fue el mismo: Acoso local... y gol visitante. En esta ocasión, una bonita jugada entre Miguel y Juan Alberto produjo el 0-2.
La sorpresa se agrandaba en el Antonio Rivillo y los locales buscaban con afán acortar distancias, aunque sufriendo para doblegar a unos gaditanos que a la contra ponían en jaque a los jugadores de Castedo.
Con el marcador en contra, el Puertollano intensificó su presión en la salida de balón rival, fruto de lo cual llegó el 1-2, obra de Mehdi. Y de inmediato pudo llegar el empate, pero entre la precipitación local y las buenas intervenciones de Zuza se perdieron las oportunidades para ello.
A falta de dos minutos para el descanso el Puertollano cometió su quinta falta, hecho que no tuvo incidencias porque, segundos después, los colegiados no apreciaron falta en una jugada que parecía clara infracción a Zequi por parte de Mehdi. De esta forma, el descanso llegó con sufrimiento gaditano, pero con un 1-2 justo por su mayor puntería y aplicación defensiva.
La segunda parte comenzó con unos minutos de locura. En segundos, de nuevo Miguel hizo el 1-3, pero los locales, lejos de venirse abajo, apretaron más que nunca. Mehdi recortó distancias con un fuerte disparo por el centro ante el que Zuza no pudo reaccionar. Espoleado por el gol, el Puertollano se volcó en ataque, esta vez con más puntería que en la primera mitad. Nano, empató el partido al finalizar una jugada colectiva en el minuto 22, con casi toda la segunda mitad por jugarse y un Cádiz CF Virgili acusando el cansancio.
Con semejante panorama, pocos apostaban a un resultado positivo para los cadistas, que sin embargo iban a hacerse con los tres puntos en liza.
Se traspasó el meridiano con dominio de los de Castedo, pero con los amarillos perfectos en defensa para impedir los pases interiores que les pudieran hacer daño en forma de goles.
Con el paso de los minutos, el Puertollano se fue atascando en ataque mientras que los gaditanos tampoco lograban finalizar con éxito sus escasas llegadas al marco rival.
Pero todo cambió a falta de cuatro minutos para el final. En un ataque manchego Jesuli agarró a Tomasito, que metió el codo al gaditano y los dos recibieron la amonestación, lo que conllevó la expulsión del local.
Aprovechando esta superioridad numérica, Antonio hizo el 3-4 favorable a los gaditanos. Y ya con poco más de dos minutos para el final el Puertollano se jugó el todo por el todo.
El técnico local optó por la figura del portero-jugador para atacar en busca de un gol a la desesperada. Esta jugada no pudo salir peor, ya que el gaditano Zequi robó el balón dos veces en su propio campo y desde allí batió en sendas ocasiones la portería rival.
Al final, los gaditanos sellaron un 3-6 mucho más luchado de lo que pueda parecer, lo que desató una “fiesta” cadista por un triunfo tan merecido como trabajado.