El Pleno del Ayuntamiento somete a debate mañana el borrador del Reglamento Ético y de Buen Gobierno para obstaculizar la aparición de corrupción, fortalecer las instituciones, generar confianza en la ciudadanía, mejorar la fiscalización de la actividad pública, la transparencia y la rendición de cuentas, fomentar la participación ciudadana y el crecimiento económico y social, e incrementar la eficacia y la eficiencia en la gestión de los recursos públicos.
El reglamento está compuesto por 23 artículos, divididos en cinco capítulos, que establecen, en primer lugar, los valores y principios rectores de la actividad municipal. En concreto, se cita la necesidad de obrar ejemplarmente, contribuyendo al prestigio, la dignidad y la imagen de la institución, garantizando el principio de igualdad de trato a todas las personas y evitando toda discriminación, con honestidad y desinterés, de manera objetiva e imparcial. El documento remarca la necesidad de rendir cuentas y proceder de manera transparente e íntegramente, sin uso abusivo del cargo para obtener beneficios indebidos.
En este sentido, ofrece compromisos y recomendaciones aplicables a concejales, miembros de los órganos de gobierno de las entidades municipales vinculadas al Ayuntamiento o dependientes de éste, personal directivo, funcionarios de Administración Local con habilitación de carácter nacional, Secretaría General, de la Intervención, Tesorería y su sector público ocal y personal eventual.
Destacan las recomendaciones en materia de conflictos de intereses. El reglamento establece que “las personas comprendidas en el ámbito subjetivo del Reglamento” deberán “abstenerse de aceptar regalos o presentes y también favores o servicios en condiciones más favorables que puedan condicionar el desarrollo de sus funciones”. En concreto, el texto considera que “superan los usos habituales, sociales o de cortesía los regalos o presentes que, individualmente o agrupados, superen los 50 euros”. Todos deberán ser inscritos en el Registro Interno de Alcaldía, en cualquier caso, detallando empresa o persona de origen, persona receptora y destino, devolución u otro. Tampoco aceptarán invitaciones, viajes, comidas o compensaciones económicas por impartición de conferencias o participación en medios por actividades vinculadas con el ejercicio de sus funciones o beneficio que pueda poner en duda su honestidad de aquellas personas o particulares que hayan sido contratadas o puedan objetivamente serlo en el ámbito específico de sus responsabilidades.
En materia contractual, el reglamento establece que los cargos públicos se abstendrán, igualmente, de promover cualquier procedimiento de contratación pública con personas físicas o jurídicas con las que hayan mantenido algún tipo de vinculación laboral o profesional en los dos últimos años previos al nombramiento y de participar en ese proceso. En el caso de las subvenciones, han de abstenerse de participar en más de un 10%, de manera directa o indirecta, en empresas que perciban ayudas sin concurrencia competitiva.
Para garantizar el cumplimiento, el borrador contempla la creación de un Consejo de Ética y Buen Gobierno con la participación de tres profesionales de reconocido prestigio en el ámbito de la defensa de la ética, la integridad y la transparencia pública.