El partido habla de "maltrato" a los animales y del peligro para los corredores
El Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (Pacma) acusa al Ayuntamiento de Arcos “de poner en peligro a los ciudadanos durante el Toro de Aleluya” y condena el encierro que se saldó con el traslado hospitalario de dos hombres. La formación política recrimina al Ayuntamiento este tipo de fiestas “innecesariamente peligrosas para animales y personas”, e insta al Consistorio a establecer formas de ocio “sanas” que no impliquen riesgos ni sufrimiento para los participantes. El partido apunta a la conducta de los participantes más atrevidos “que intentaban tentar y burlar a los toros” y a la presunta “falta de agilidad o experiencia de los corredores” como posibles motivos por los que se produjeron los accidentes. Pacma insiste en “la urgente necesidad de acabar con este tipo de fiestas debido a la peligrosidad que comprenden y lo crueles que resultan para los animales”. La formación explica que el comportamiento del toro en el momento del encierro es de “total desesperación: el animal es liberado en medio de una muchedumbre que grita, en ocasiones le golpea y le provoca para que embista los barrotes, haciéndose daño y aumentando su nivel de angustia, lo que le lleva a correr desenfrenadamente y atacar todo lo que ve sin distinción”.