Los videoclubs resiten a la ferocidad de internet
Internet, la crisis económica y hasta el clima afectan al alquiler de películas
Ponerse un chandal y bajar a alquilar una película al videoclub es una costumbre que se está perdiendo. En los últimos tiempos, el sector de la venta y alquiler de videos está perdiendo terreno frente a las miles de posibilidades que en este campo ofrece la red de redes: internet.
Los avances en el mundo de las descargas de todo tipo de material audiovisual a través de internet obligó a cerrar en los últimos años numeros establecimeintos de este tipo y a tiendas míticas como Blockbuster, que cerró hace dos años sus centros en toda España.
En Jerez el negocio del videoclub sigue funcionando “aunque notamos la bajada de ventas”. La crisis, internet e incluso el buen tiempo que estamos teniendo afectan al negocio. “A nosotros nos va bien pero como a todos nos afecta la crisis e internety sobretodo el clima, que no propicia que la gente se quede en casa y alquile una película”, aseguró Tamara Banderas del videoclub Hollywood. “Internet y el clima son los dos problemas a combatir porque a pesar de la crisis tampoco es tan caro alquilar una película”.
La calidad del DVD es el argumento principal de los propietarios de los videoclubs frente a la feroz competencia de internet. “No es los mismo ver una película en DVD, la calidad de la imagen y del sonido no tiene nada que ver con una película que te has descargado de internet”, señaló María Jesús Ramírez, propietaria del Videoclub Zona Norte.
Convencer al público de que la calidad y el precio de una película en alquiler es mejor que lo que ofrece la red supone la lucha diaria de los videoclubs. “Nosotros alquilamos las películas por un euro y medio y dos películas por dos euros, creo que merece la pena”.
Los propietarios del videoclub Zona Norte son unos aventureros que han comenzado en esto hace un mes “porque nos gusta el cine y vimos un filón en el alquiler de las películas ya que ir toda la familia al cine cuesta muy caro”.
Regulación
La superviviencia de estos establecimientos pasa por regular las descargas en internet. “Si hubiera una ley que regulara las descargas de internet venderíamos mucho más”.
“Las descargas no deberían ser gratis porque esto no sólo perjudica a los videoclubs, si no a todo el negocio del cine”, aseguró Sergio Verdú del Videoclub Zona Orange. “Esto nos afecta mucho porque nada más estrenarse una película ya está en internet, por suerte quedan clientes que buscan calidad”.
Para combartir estos problemas los videoclubs tiene un horario más amplio, ofertas y ofrecen una amplia gama de cine clásico, como el Videoclub Zona Orange.
Los avances en el mundo de las descargas de todo tipo de material audiovisual a través de internet obligó a cerrar en los últimos años numeros establecimeintos de este tipo y a tiendas míticas como Blockbuster, que cerró hace dos años sus centros en toda España.
En Jerez el negocio del videoclub sigue funcionando “aunque notamos la bajada de ventas”. La crisis, internet e incluso el buen tiempo que estamos teniendo afectan al negocio. “A nosotros nos va bien pero como a todos nos afecta la crisis e internety sobretodo el clima, que no propicia que la gente se quede en casa y alquile una película”, aseguró Tamara Banderas del videoclub Hollywood. “Internet y el clima son los dos problemas a combatir porque a pesar de la crisis tampoco es tan caro alquilar una película”.
La calidad del DVD es el argumento principal de los propietarios de los videoclubs frente a la feroz competencia de internet. “No es los mismo ver una película en DVD, la calidad de la imagen y del sonido no tiene nada que ver con una película que te has descargado de internet”, señaló María Jesús Ramírez, propietaria del Videoclub Zona Norte.
Convencer al público de que la calidad y el precio de una película en alquiler es mejor que lo que ofrece la red supone la lucha diaria de los videoclubs. “Nosotros alquilamos las películas por un euro y medio y dos películas por dos euros, creo que merece la pena”.
Los propietarios del videoclub Zona Norte son unos aventureros que han comenzado en esto hace un mes “porque nos gusta el cine y vimos un filón en el alquiler de las películas ya que ir toda la familia al cine cuesta muy caro”.
Regulación
La superviviencia de estos establecimientos pasa por regular las descargas en internet. “Si hubiera una ley que regulara las descargas de internet venderíamos mucho más”.
“Las descargas no deberían ser gratis porque esto no sólo perjudica a los videoclubs, si no a todo el negocio del cine”, aseguró Sergio Verdú del Videoclub Zona Orange. “Esto nos afecta mucho porque nada más estrenarse una película ya está en internet, por suerte quedan clientes que buscan calidad”.
Para combartir estos problemas los videoclubs tiene un horario más amplio, ofertas y ofrecen una amplia gama de cine clásico, como el Videoclub Zona Orange.
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