La minería metálica, la industria del cuero y del calzado, papeleras, el sector químico y los fabricantes farmacéuticos son las únicas cinco ramas, de la treintena que integran la industria andaluza, que han sorteado la crisis del coronavirus en lo que va de año.
Estas ramas industriales no sólo no se han visto perjudicadas por la crisis derivada de la pandemia de la COVID-19, sino que han aumentado su producción durante los cuatro primeros meses de este año, en comparación con la del mismo periodo del año anterior, según los indicadores del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) consultados por Efe.
Un aumento de la actividad que contrasta con el desplome del 27,2 % que ha sufrido la producción industrial andaluza en abril, respecto a la del mismo mes del año pasado, lo que le ha supuesto una bajada acumulada del 15,2 % en los cuatro primeros meses de este año, en comparación con la del mismo periodo del 2019, la caída más acusada del Índice de Producción Industrial de Andalucía de los últimos años, una vez corregido este indicador de los efectos estacionales y de calendario.
LA MINERÍA, IMPARABLE
El caso más llamativo es el de las explotaciones de la faja pirítica, que extraen minerales metálicos en Huelva y en Sevilla, cuya producción acumulada en los cuatro primeros meses de este año se ha disparado nada menos que el 125,2 %, en comparación con la del mismo período del año anterior.
En este aumento influye que la mina Cobre las Cruces, que la multinacional First Quantum explota en los municipios sevillanos de Guillena, Salteras y Gerena, estuvo prácticamente paralizada durante los cuatro primeros meses del año pasado, tras el accidente sufrido el 23 de enero al derrumbarse un talud y precipitarse al interior de su corta unos 15 millones de metros cúbicos de material.
También influye en esta comparativa que la minería metálica andaluza fue declarada industria esencial nada más decretarse el estado de alarma, por lo que sólo interrumpió su producción unos escasos días de confinamiento.
La industria andaluza de fabricación de productos farmacéuticos también ha aumentado su producción acumulada hasta abril, con una subida del 14,9 % respecto a la del mismo periodo del año pasado, beneficiada por la fuerte demanda de estos bienes como consecuencia de la pandemia, que sólo en abril impulsó la fabricación el 57,3 % más que en el mismo mes del 2019.
El sector químico andaluz, cuyos dos grandes complejos industriales, de Huelva y de Algeciras (Cádiz), tampoco se han visto afectados por el confinamiento al ser declarados industrias esenciales, ha sorteado igualmente la crisis del coronavirus ya que ha logrado aumentar su producción el 17,5 % en abril, con respecto al mismo mes del año pasado, lo que le permite acumular un crecimiento del 13,2 % en el acumulado de los cuatro primeros meses de este año.
Las otras dos ramas industriales andaluzas que han aumentado su producción en lo que va de ejercicio son las fabricantes de papel, con un incremento del 5,6 % acumulado de enero a abril, y la industria del cuero y del calzado, que ha aumentado su fabricación el 11,1 % en los cuatro primeros meses del año, a pesar del fuerte retroceso del 20,3 % que sufrió en abril.
INDUSTRIAS MÁS PERJUDICADAS
En el lado opuesto se encuentran la otra veintena de ramas industriales andaluzas, cuya producción ha caído en lo que va de año, en especial la de fabricación de productos informáticos, electrónicos y ópticos, cuya actividad cayó el 58,0 % en abril, en pleno confinamiento, con lo que acumula un descenso de su producción del 39,1 % en los cuatro primeros meses de este año.
Otro segmento industrial muy perjudicado como consecuencia de la crisis sanitaria y la consiguiente paralización económica es el de suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, cuya producción cayó el 30,4 % en abril y acumula un descenso del 29,7 % en los cuatro primeros meses de este año.
La fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques se desplomó el 76,8 % en abril, con lo que suma una caída del 27,5 % en los cuatro primeros meses del año.
Igualmente perjudicado esté el sector de la confección de prendas de vestir, cuya producción se hundió el 69,9 % en abril, por lo que acumula un descenso del 21,7 % desde comienzos de este año.
La industria de la alimentación también presenta una caída de su producción, con un descenso del 10,8 % en abril y una bajada acumulada del 21,7 % en los cuatro primeros meses del 2020.