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El jardín de Bomarzo

E Ignacio blandió su monopatín

La historia demuestra que la expresión más bruta del odio siempre ha formado parte de la condición humana

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  • El jardín de Bomarzo. -

La historia demuestra que la expresión más bruta del odio siempre ha formado parte de la condición humana, pero parecía que la civilización, la educación elevada a muy altos porcentajes, la socialización general promovida por la modernización convertían en imposibles determinadas acciones de horror. Resulta casi imposible entender qué oscuro rincón de una mente alberga espacio al espanto necesario para asesinar a un bebé de meses o acuchillar a inocentes por la calle, quizás fruto de un odio social cultivado y que brota aquí o allá como muestra de lo peor de nosotros mismos y lo hace como la mala hierba a saltos en el monte. Ante eso, todo lo demás resulta inoportuno.

Salvo el reverso al mal, que es el bien. El de Ignacio, ese joven armado con un monopatín y que no dudó en dar la cara para defender la vida de una mujer atacada, indefensa. Hay tantas cosas buenas en su espontánea y generosa acción de segundos que no se me ocurre manera más noble y elevada de morir. Todas las flores de este mi jardín -todas- son para Ignacio, ese chico con cara de buena gente que ha dado su vida sin dudarlo para defender la de otra persona, mujer, y de paso y sobre todo recordarnos a todos la expresión máxima que representa ser un humano en su versión hombre. Un hombre de verdad.

Crisis. Se veía venir que Susana Díaz remodelaría su Gobierno a la primera de cambio y la primera de cambio fue la noche de este pasado jueves. "Ahora toca Andalucía", dijo; ¿antes no? El caso es que sabe que lo que se avecina será duro, sobre todo porque ha logrado algo tan complicado como es poner de acuerdo a Partido Popular, Podemos e Izquierda Unida en eso de atacarla a dentellada limpia. Solo Ciudadanos se mantiene cerca pero con cautela, sabiendo que si juega bien sus cartas tiene mucho que ganar pero midiendo al centímetro hasta dónde se acerca y cuándo dejará de hacerlo para que la proximidad no le arrastre a un abismo electoral; de hecho, los socios de los gobiernos socialistas de las últimas décadas han pagado muy caro ese apoyo y ratificarlo pueden tanto IU como Partido Andalucista.

Cesa a los representantes de dos consejerías estrellas en la historia del socialismo andaluz como son Sanidad y Educación, foco de las más ardientes polémicas en los últimos tiempos y pone al frente de ambas a profesionales del sector con amplio bagaje en la negociación como son Marina Álvarez, en Salud y ex gerente del hospital Reina Sofía de Córdoba, y Sonia Gaya, en Educación, mujer que proviene de UGT y que, por ello, acumula experiencia amplia en la negociación necesaria para un campo siempre conflictivo -en total, seis consejeros de Sevilla-. Cambios también, como era previsible, en Agricultura, Empleo y Justicia, mantiene a Jiménez Barrios como segundo en Presidencia y cambia a Miguel Ángel Vázquez de portavoz a Cultura, incorporando allí al periodista Juan Carlos Blanco, que en su día fuera Director General de Comunicación Social y que, inexplicablemente, dimitiera del cargo a los pocos meses -Mario Jiménez dijo "no" porque el cambio, parece ser, era menos rentable en comparación a su nómina actual...-. Pero la remodelación tendrá más recorrido y habrá cambios en segundos y terceros niveles en todas las provincias, dando muestras que le está metiendo un jaleo a todo su ejecutivo porque sabe que lo que vienen son curvas, pronunciadas, y por tanto la pelea para mantenerse en el poder será descarnada.

En la provincia de Cádiz, por ejemplo, será nombrado este martes Viceconsejero de Presidencia el actual Delegado del Gobierno, Fernando López Gil, que de este modo da el salto a Sevilla, quizás no encabezando una Consejería como al principio pudo ser y más de su gusto hubiese sido, pero sin duda ocupará un cargo de renombre y con él se lleva la gestión del ITI de Cádiz -tal y como pidió y, parece, concedido ha sido-. Su baja en la provincia será cubierta por Juan Luis Belizón, actualmente Delegado Territorial de Educación, nacido en Chiclana y al que no tardarán en ver como alternativa en dicha localidad para el actual alcalde, José María Román, que es el principal baluarte de Pedro Sánchez en la provincia.

Por otra parte, IU tenía previsto echar a Diego Valderas de haber aceptado el nombramiento que le propuso Díaz sobre su comisionado para la Memoria Histórica, que ha sido considerado como un ataque ruin y puñalero a la formación que dirige Antonio Maíllo -su discurso de esta semana a la presidente fue uno de los más duros oídos en tan noble sede-; es muy de otra época eso de inventarse un cargo que no contempla la Ley para, con ello, dinamitar a una formación política adversaria. La jugada le salió mal a Díaz, que últimamente acumula derrotas por batallas y que sabe que el futuro será muy difícil a tenor de cómo se están agrupando alrededor suya tal y como en un episodio de Juego de Tronos y Khaleesi se ve rodeada y sin dragones; la única vía de salvación es la urna, para lo cual se prepara con esta reorganización general y la duda palpable de cómo reaccionará el electorado andaluz después del trajín de este último año.

Sondeos. El publicado esta semana sobre Jerez ha desatado reacciones dispares entre las distintas formaciones, más tratándose de la ciudad más poblada de la provincia y, sin duda, una de las que concentra más inquina política por metro cuadrado. A unos les ha parecido mal la valoración de la gestión, a otros la de determinado candidato/ta, a los de rojo poco para tanto trabajo y todos buscando concejales perdidos en este o aquel distrito. La verdad es que un sondeo para un político es lo que un filete jugoso a un tigre hambriento, algo sumamente irresistible. Eso sí, tras verlo y criticarlo, o lo contrario según para cada cual, procede decir lo de siempre: no me afecta en absoluto, los sondeos no son fiables, seguramente está cocinado, de hecho lo ha hecho este o aquél con a saber qué oscuras intenciones, aún queda mucho... Pero todo el mundo toma nota, hace cálculos, medita estrategias. Algo por el estilo a lo que pasará en Cádiz en pocos días.

 

Terror. Es impactante como los últimos atentados terroristas se producen justo antes de una consulta electoral con la clara intención de alterarla, de hecho el votante se va a los extremos cuando vota con el iris teñido de sangre. Pasó en Francia. Pasará en Inglaterra. Logran así radicalizarnos a todos. Y es muy difícil combatirlo. Quizás el único modo sea haciéndonos fuertes con la secuencia imaginaria que a todos nos queda de Ignacio blandiendo su monopatín en defensa de la humanidad.

Bomarzo

bomarzo@publicacionesdelsur.net

http://andaluciainformacion.es/EL-JARDIN-DE-BOMARZO/

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