Articulo ¡Ahora si puede el Banco Central Europeo!
Ahora sí, ¡ahora si se puede!, como diría más de uno. Hacer memoria permite sorprenderse de cómo antes no, y ahora sí, el Banco Central Europeo está dispuesto a “inyectar” 60.000 millones de euros ¡mensuales”, fundamentalmente al sistema bancario privado europeo. Hasta hace no mucho estaba bloqueada la intervención del BCE para paliar los desastrosos efectos de la crisis, provocada por el ansia especulativa y el inmenso egoísmo financiero. Cuando se gestó la super-crisis económica que estamos padeciendo allá por 2006, ¿Qué hacía el Banco Central Europeo?
Recordar como esa institución dejó desamparados a los gobiernos de los países europeos donde con mayor fuerza pegó el descalabro financiero, provocado precisamente por los sectores hegemónicos del gran capital mundial. Acordarse de cómo la inoperancia del BCE provocó el negocio del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, que se lanzaron como lobos a descuartizar a las agonizantes cuentas públicas, comprando a la baja e imponiendo suculentos intereses a las deudas soberanas. Recordar cómo se empujó a los gobiernos de turno y parlamentos a que asumieran de la noche a la mañana la obligación constitucional de pagar las deudas contraídas, por imperativo de las grandes corporaciones financieras mundiales. Recordar cómo a partir de 2009, ese Banco Central Europeo, comenzó a prestar dinero, sólo a los bancos, a un interés ridículo (llegó al 0,25%), con la “intención” de que fluyera el crédito, que nunca llegó, a las pequeñas empresas y hogares, y de esa forma incentivar el consumo… Han pasado 5 años y el BCE lleva destinado más de un billón de euros, que los grandes agujeros negros bancarios se han tragado, y los pueblos europeos siguen aquejados de ruina, desempleo y esquilmados en sus derechos sociales y laborales…Y todo ello ante la mirada expectante de miles de políticos que, tanto en el parlamento europeo como en los nacionales, no han hecho nada para evitarlo.
¡Ahora sí! Ahora si se puede, poner en marcha las maquinas que impriman más de medio billón de euros, aunque la moneda europea se devalúe hasta equipararse con el dólar americano y se incentive una artificial inflación, porque la deflación, según dicen, no es nada buena. Más mentiras que el pueblo tiene que escuchar porque a ellos, les viene muy bien cada nueva incidencia. Cuando subían los precios, había que contener los salarios, para evitar la inflación, ahora se siguen bajando los salarios y comenta más de un desalmado que como bajan los precios no hace falta subir los salarios. Cuando sube el precio de barril de petróleo, es “lógico”, eso dicen los piratas de turno, que suba el precio de la gasolina. Cuando baja (casi en dos terceras partes), el precio del barril de petróleo, esos mismos voceros pretenden convencernos de que no es posible bajar el precio del gasoil en la misma proporción. Pero claro el BCE ahora si puede, como siempre, hacer que los de siempre hagan su agosto.
Fdo. Rafael Fenoy Rico
