El impacto agregado de los planes de reestructuración del sector financiero español sobre el crédito total al conjunto de las sociedades no financieras entre septiembre de 2012 y marzo de 2014 fue del 0,4%, según el Boletín mensual del Banco de España.
No obstante, la institución que preside Luis María Linde señala que es posible que esta cifra "exagere" el efecto contractivo, "ya que el ejercicio realizado no tiene en cuenta la influencia global positiva de la recapitalización y reestructuración del sistema financiero español sobre la confianza de los inversores".
El Banco de España ha estudiado el ajuste reciente que han acometido las entidades que recibieron ayudas públicas y el impacto que ello ha podido tener sobre la oferta global de crédito a las empresas.
Como conclusión, señala que las compañías españolas han podido compensar "una parte significativa" de la contracción de la oferta de préstamos asociada a los planes de reestructuración. Sin embargo, explica que la sustituibilidad "no ha sido perfecta" y las dificultades para reemplazar unos préstamos por otros han afectado a las pymes.
Así, entre septiembre de 2012 y marzo de 2014 la ratio de sustitución ha sido del 70%, que resulta de una caída del 20% en la financiación a las empresas por parte de las entidades de crédito incluidas dentro del grupo 1 (BFA-Bankia, Catalunya Ciaxa, NCG Banco y Banco de Valencia), del 14% en el crédito total observado y del 11,3% en el teórico.