El complejo proceso administrativo que la Mancomunidad de Servicios de la Provincia de Huelva (MAS) y los municipios que la componen están siguiendo para obtener la financiación necesaria para sus proyectos se ha saldado durante el mes de septiembre con el respaldo casi unánime de los 65 ayuntamientos. De esta forma, y tras un intenso y prolongado debate, se da un paso más en el camino para concluir un proceso destinado, sobre todo, a mejorar la gestión de los servicios de agua y recogida de residuos y a facilitar la obtención de recursos económicos por parte de los ayuntamientos.
Según ha indicado Giahsa en un comunicado, con el “beneplácito” de la totalidad de plenos municipales de la Cuenca Minera, y a falta de concluir en unos días la tramitación administrativa de la operación financiera, los ayuntamientos de la comarca, que representan más del 9% de la población de la MAS, han mostrado su respaldo, tanto en los respectivos plenos como en el de la Mancomunidad celebrado el pasado 30 de septiembre. Los siete municipios son Berrocal, Campofrío, El Campillo, La Granada de Riotinto, Minas de Riotinto, Nerva y Zalamea la Real.
Con independencia de las distintas opiniones que durante las últimas semanas se han vertido, principalmente por parte de formaciones políticas contrarias al proyecto de servicio público mancomunado que representa MAS, la Mancomunidad defiende que se trata de una operación “crucial para el presente y futuro de nuestra provincia” y que “estamos haciendo un gran esfuerzo para que la consecución de estos fondos, que pueden aportar 85 millones de euros para la economía provincial, no suponga grandes sacrificios para nadie”.
Para ello, desde MAS y los ayuntamientos se prevé articular una serie de bonificaciones que mitigarán, en todo o en gran parte, el incremento de tarifas que conlleva la financiación. Igualmente, se está trabajando en actualizar al máximo los datos de empadronamiento, que permiten a muchas viviendas beneficiarse de mejores precios en el agua. Giahsa, con la colaboración de muchos ayuntamientos, también está impulsando la concesión de bonificaciones de carácter social, que permiten a miles de pensionistas, personas dependientes y familias con rentas bajas o con todos sus miembros en paro beneficiarse de rebajas en el recibo del agua que alcanzan hasta el 25% del precio total.
Estas medidas pretenden entroncar con un profundo sentido de servicio público, pues persiguen en la medida de lo posible que ninguna persona que no disponga de recursos económicos suficientes pierda el acceso a un bien básico como es el agua. Más allá de estas consideraciones, la obtención de esta financiación permitiría a Giahsa afrontar determinadas mejoras del servicio, que no han sido posibles hasta ahora tanto por la falta de recursos como por la inestabilidad institucional.