Rumbo asegura que es falso que impida a Emed gestionar las balsas de estériles de Riotinto

En relación a las noticias aparecidas en la prensa en las que Emed “avisa al juzgado que Rumbo impide la gestión de las balsas”, Rumbo 5.Cero quiere hacer constar que dichas afirmaciones son categóricamente falsas. La falsedad de esta declaración viene demostrada en que el Juzgado número 1 de Valverde del Camino no ha aceptado la denuncia interpuesta, ya que no acredita nada, salvo su propio decir, siendo tan sólo una estrategia que viene siguiendo Emed susceptible del delito de injurias o calumnias.

El personal de Emed viene, cuando quiere, accediendo a los terrenos de Rumbo, que le permite el acceso como puede demostrarse con los partes diarios de entrada y salida que elabora el personal de Rumbo, y que firman las personas de Emed que acceden a nuestros terrenos.

Tan solo cuando Emed pretende realizar tareas que no son de mantenimiento y que entrañan obra nueva, desde Rumbo 5.Cero se les ha solicitado detalle de los trabajos a realizar, dado que nadie consiente que en terrenos de su propiedad, terceras personas realicen actuaciones que puedan tener consecuencias para el propietario sin conocer el alcance de las mismas.

Entre estas últimas existen, concretamente, unas actuaciones de recrecido del muro de la presa de Cobre que Rumbo 5.Cero no tiene constancia de que estén autorizadas por las administraciones competentes y que a juicio de nuestros técnicos no deben realizarse y que solo benefician a Emed, pues pretenden que en las balsas existentes puedan depositar la producción de las reservas que, de forma artificial y sin realización de sondeos, Emed ha aumentado para poder vender en la Bolsa su proyecto. Nos parece mas que significativo que las reservas contrastadas que poseía la mina cuando Emed tomó el control de la misma se hayan duplicado sin haber realizado ningún trabajo de sondeos, que son los que permitirían ese aumento de reservas con la fiabilidad necesaria para poder asegurar que existe mineral tratable.

Nos parece una nueva artimaña de Emed que, igual que pretende chantajear a la Administración promoviendo un encierro de sus trabajadores, en lugar de ceñirse a la normativa aplicable y cumplir con los requerimientos que le piden las Administraciones, ha duplicado las reservas existentes, acusa a Rumbo de no dejarles trabajar cuando en el caso de Corta Atalaya tampoco ha hecho nada y no tiene nadie a quien echar la culpa, y solo se preocupa de desinformar a la opinión publica y de aprovecharse de la delicada situación económica de la cuenca minera para intentar movilizar a una población ansiosa de que se genere empleo, cuando el freno a la creación de empleo es precisamente la existencia de una empresa tan poco fiable como Emed, ya que otras actuaciones mineras mas complejas están funcionando porque tenían detrás a empresas serias que han sabido convencer a la Administración de su seriedad y solvencia y ésta ha autorizado dichos proyectos.