Varios países de la OTAN mostraron este viernes apertura a que Ucrania pueda usar las armas que le han cedido para atacar objetivos en territorio ruso, un asunto que sigue dividiendo a los aliados aún después de que Estados Unidos haya dado luz verde si es para defender la región limítrofe de Járkov.
“Todos esperamos que esto se haga de acuerdo con la ley internacional y de manera responsable”, dijo el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, a la prensa a su llegada a una reunión informal de ministros de Exteriores aliados.
Reunidos en el palacio Czernin, sede del ministerio checo de Exteriores, donde se disolvió el Pacto de Varsovia en 1991, los ministros tratan hoy los preparativos de la cumbre aliada de julio en Washington, en la que esperan aprobar un papel mayor de la OTAN en la coordinación del suministro de armas, municiones y entrenamiento para Ucrania, así como un nuevo compromiso financiero.
Pero también tratarán con prioridad la petición de Ucrania de poder usar las armas que le envían en territorio ruso, especialmente desde que Rusia ha redoblado su ataque contra Járkov en el último mes, algo a lo que ha accedido Estados Unidos mientras se empleen en las proximidades de esa región fronteriza.
“Rusia ha atacado a otro país, ha violado el derecho internacional, ha invadido Ucrania, y Ucrania tiene derecho a la autodefensa y eso incluye también atacar objetivos militares legítimos dentro de Rusia”, resumió Stoltenberg.
La ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, defendió implícitamente la posibilidad de usar armamento de la OTAN contra objetivos en Rusia, siempre y cuando sirva para defender a la población y la infraestructura civil en Ucrania, momentos antes de que el canciller, Olaf Scholz, diera su apoyo desde Berlín a la iniciativa.
"Nadie está golpeando a Rusia. Es Rusia la que está golpeando ilegalmente el derecho internacional en Ucrania. Ucrania se está defendiendo y estamos haciendo todo lo posible para ayudar para que se pueda defender", agregó.
La ministra letona, Baiba Braze, afirmó que han realizado un análisis jurídico y político exhaustivo que asegura que el derecho a la defensa que Ucrania tiene en virtud de la Carta de las Naciones Unidas contra la agresión militar de Rusia “incluye también el derecho no sólo a atacar a las fuerzas rusas en territorio ucraniano, sino también a los objetos militares legítimos también en el territorio ruso”.
Para la ministra neerlandesa, Hanke Bruins Slot, la Carta de Naciones Unidas dice que, en lo que respecta a la defensa propia, “no hay límites geográficos sobre el uso de armas, así que ese es el principio común”.
“Las leyes de la guerra regulan que Ucrania tiene derecho a defenderse según las normas del derecho humanitario”, apuntó el titular polaco, Radoslaw Sikorski.
Su homólogo sueco, Tobias Billström, recordó que la entrega de todas las armas que Suecia ha dado a Ucrania se ha producido “sin ninguna restricción, siempre que se siga por su puesto el derecho humanitario internacional”, y consideró que los ucranianos “deberían ser libres para utilizarlas para defenderse”.
“Ucrania tiene todo el derecho a utilizar las armas para protegerse a sí misma y también en territorio de Rusia si hay necesidad, que el objetivo sea la infraestructura militar o su infraestructura estratégica”, apuntó el ministro estonio, Margus Tsahkna.
El ministro lituano, Gabrielius Landsbergis, aseguró que “los ucranianos son absolutamente capaces de definir los objetivos” y que confía “plenamente en que saben ver y comprender lo que se necesita, de dónde procede la amenaza”.
En cambio, países como Italia mostraron respaldo a Ucrania pero dejaron claro que no quieren que sus armas se usen en territorio ruso.
“Apoyamos a Ucrania pero es imposible para Italia enviar a soldados a Ucrania y atacar con nuestras armas en Rusia”, dijo su ministro, Antonio Tajani, quien explicó que la Constitución italiana les prohíbe desde el fin de la Segunda Guerra Mundial “luchar contra otros países”.
“Es imposible usar las armas en Rusia porque no estamos combatiendo a Rusia, estamos defendiendo a Ucrania”, opinó.
Por su parte, el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, aseguró que Ucrania no ha solicitado la autorización de Madrid para poder atacar territorio ruso con las armas que España le dona, por lo que el material entregado es "para que Ucrania pueda defenderse y defender su territorio".
La ministra finlandesa, Elina Valtonen, se limitó a subrayar la necesidad específica de Ucrania de defensas aéreas, dado que los ataques que más dañan su infraestructura civil y energética proceden del otro lado de la frontera rusa.