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Sábado 23/11/2024
 
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Andalucía

La IA y la resonancia magnética abren otro horizonte en diagnósticos y tratamientos

Disminuyendo la necesidad de procedimientos invasivos innecesarios y mejorando la calidad de vida de las pacientes

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  • Inteligencia Artificial. -

La inteligencia artificial (IA) y la resonancia magnética (RM) abre un panorama integral para la detección temprana y evaluación del cáncer de mama subtipo luminal, lo cual puede resultar en diagnósticos más precisos y tratamientos más específicos y personalizados, disminuyendo la necesidad de procedimientos invasivos innecesarios y mejorando la calidad de vida de las pacientes, según las expertas y especialistas en mama de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) en su artículo publicado en la revista 'Radiología'.

"El cáncer de mama es el tipo más común en España (estimándose que una de cada ocho mujeres lo desarrollará en algún momento de su vida), y dentro de este grupo, el subtipo luminal constituye la mayoría (65%). Se estima que en 2023 aproximadamente 35.000 mujeres recibieron el diagnóstico de cáncer de mama", explican las médicas.

La RM juega un papel crucial en el diagnóstico y estadificación del cáncer de mama, ya que ofrece imágenes de alta resolución que permiten evaluar la extensión del tumor e identificar lesiones adicionales, siendo particularmente útil en casos de mujeres con mamas densas (mayor cantidad de tejido fibroglandular y menos tejido graso).

El test ODXRS es una herramienta valiosa para la toma de decisiones terapéuticas. Evalúa la expresión génica del tumor para calcular una puntuación de recurrencia, brindando información sobre el riesgo de recidiva del cáncer de mama en 10 años y ayudando a determinar la necesidad de tratamientos adicionales, como la quimioterapia.

"La IA puede intervenir en varias etapas y su incorporación representa un avance significativo en la detección temprana y el tratamiento personalizado", destacan las doctoras Aranaz Murillo y García Barrado, autoras del artículo de la revista 'Radiología y especialistas de mama' de la SERAM.

En lo que respecta a la detección, algoritmos de IA analizan imágenes mamográficas y de resonancia magnética con una "teórica" mayor precisión, identificando patrones sospechosos que podrían pasar desapercibidos en evaluaciones convencionales. Estos modelos de IA también pueden asistir en la interpretación de resultados genómicos, proporcionando información adicional sobre la agresividad del tumor y posibles respuestas a tratamientos específicos.

En cuanto al tratamiento, la IA puede ser de utilidad en la toma de decisiones clínicas. Por ejemplo, mediante la integración de datos clínicos, genómicos e imágenes radiológicas, los modelos de IA pueden predecir la respuesta individualizada a terapias específicas, permitiendo establecer una estrategia de tratamiento personalizada y adaptada a las características de cada paciente.

No obstante, las doctoras Aranaz Murillo y García Barrado señalan que "a pesar de que utilizan la IA en su práctica diaria, algunos aspectos aún se encuentran en fase de investigación y actualmente carecen de aplicabilidad clínica real, a pesar de sus prometedores resultados teóricos". "Por ello, es esencial continuar evaluando e investigando estos algoritmos para garantizar su precisión, integración en la práctica clínica y progresar en nuevas direcciones. En definitiva, la IA abre un abanico de posibilidades aún por explorar", añaden.

Indudablemente, la inclusión de tecnologías avanzadas, como la IA y las pruebas genómicas, evidencia la búsqueda de una personalización en el conocimiento del cáncer de mama. La detección temprana y la medicina personalizada son claves para mejorar el pronóstico y la calidad de vida, subrayando la importancia de la investigación continua y la innovación en la atención oncológica, de la cual el radiólogo forma parte.

El radiólogo desempeña un papel crucial al ser el punto de entrada al proceso y colabora en los subprocesos diagnósticos y de tratamiento del cáncer de mama, en un enfoque multidisciplinario e interdisciplinario, trabajando en colaboración con otros profesionales para ofrecer una atención centrada en la paciente.

"Además, más allá de su habilidad técnica, el radiólogo juega un papel fundamental en la comunicación con las pacientes y su entorno. Debe estar capacitado en herramientas o habilidades comunicativas para brindar información clara y comprensible, con explicaciones comprensibles y un apoyo emocional integral", especifican las doctoras Cruz Ciria y García Mur.

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