La Guardia Civil ha detenido a 33 personas en dos operaciones antidroga que se han llevado a cabo en Almería, Murcia y Castellón. En total se han incautado un total de 3.060 kilos de hachís, 17.600 euros en efectivo y 40 tarjetas SIM de teléfonos móviles.
Según informa el Instituto Armado en un comunicado, remitido a Europa Press, la operación 'Trementina' ha logrado desarticular en Almería a una organización delictiva dedicada a distribuir grandes cantidades de hachís. Fruto de esta operación se ha detenido a 16 personas en Almería y Murcia por los supuestos delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y falsificación de matrícula.
En paralelo, se han realizado seis registros en las localidades de Adra y Berja, en los que se ha incautado, entre otros efectos, un total de 17.600 euros en efectivo, cerca de 3.000 litros de gasolina y más de 40 tarjetas SIM de teléfonos móviles, utilizados para la comisión del hecho delictivo. Se han intervenido además 2 vehículos de gran capacidad, uno de ellos con matrícula falsa.
La investigación se inició a comienzos de 2020 tras seguir los movimientos realizados por varias personas, integrantes de una organización delictiva asentada en la provincia almeriense, y cuya finalidad era el tráfico de hachís a gran escala, cuyo origen estaba en el norte de África y cuyo destino final eran los países europeos.
INTENTARON METER DROGA EN PLENO ESTADO DE ALARMA
Tras estas pesquisas, la Guardia Civil estableción un dispositivo de vigilancia y control en la zona costera del municipio de Adra, que permitió detectar la presencia de una embarcación apróximandose a la costa que navegaba con las luces apagadas.
Una vez detectada, se puso en marcha el protocolo de actuación con la Central Operativa de Servicios de la Comandancia de la Guardia Civil de Almería, para coordinar con el resto de unidades en servicio. Los agentes incautaron 25 fardos de hachís con un peso total de 750 kilos, y detuvieron a tres personas.
A raíz de estas detenciones, la Guardia Civil determinó que el grupo delictivo estaba asentado en Adra, por lo que se centralizó la investigación en el desarrollo de su actividad delictiva.
De este modo, el pasado mes de marzo y en pleno confinamiento, esta misma red trató de introducir un alijo cerca de la zona de la desembocadura del río, que fue frustado por la Guardia Civil. En total se intervinieron 77 fardos que contenían 2.310 kilos de hachís, procediendo a la detención de otras tres personas.
Tras las detenciones y aprehensiones anteriores, se consiguió identificar al resto de los integrantes del grupo investigado y se procedió a la última fase de la operación, en la que los agentes llevaron a cabo 6 registros en Adra y Berja con el resultado de 10 personas detenidas.
OTRO CLAN EN CASTELLÓN
Por otra parte, la Guardia Civil ha desarollado la operación 'Atipa' en la que ha logrado desmantelar un clan familiar líder en venta de drogas en Castellón. La red gestionaba un total de nueve puntos de venta que ya han sido desactivados.
La Benemérita ha logrado detener a 17 personas que se les imputan delitos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales y organización criminal, siendo un grupo muy activo en la distribución y venta al menudeo de droga a nivel provincial y limítrofe.
Tras practicar diez registros en Castellón capital, Almassora y Burriana, la Guardia Civil además ha desmantelado cuatro plantaciones indoor de marihuana.
Los integrantes del clan delictivo adoptaban medidas extremas de seguridad, tanto en sus desplazamientos como en sus domicilios. Asimismo también lo hacían de manera sanitaria en sus puntos de venta, donde colocaban pantallas de metacrilato para la dispensa directa de la droga.