Esta semana se duplica la actividad de los Cursos de Verano de la UNED en su sede de Alcalá la Real con dos nuevas propuestas que completan su abanico temático. Una, en Palacio Abacial, más didáctica y dirigida al profesorado, centrada en el análisis de actividad docente en pro de la “innovación para mejorar las competencias docentes y profesionales”; y otra, en el Aula Magna de Capuchinos, más filosófica o metafísica, titulada “La aventura intelectual de nuestro tiempo”.
Los cursos están organizados por el Ayuntamiento de Alcalá la Real y el Centro Asociado de la UNED de la provincia de Jaén. Se completan cada noche con actividades gratuitas para los participantes que incluyen veladas de bienvenida, visitas guiadas a la fortaleza, paseos nocturnos por rincones de leyenda o un recital poético.
Piedad Yuste, la directora del curso “La aventura intelectual de nuestro tiempo”, advirtió “sobre lo que trata no entra en programas educativos normales, sus temas son tangenciales pero candentes”. Enumeró a los diferentes ponentes, tales como el profesor de Filosofía de la Universidad de Castilla la Mancha, Gerardo López que se centra en el mundo actual en China y su relación con el pensamiento de Confucio. O Eloy Rada que comentará la importancia del decrecimiento para desde una postura de cautela respecto al consumismo lograr tener un mundo más sostenible.
Enrique Gallud durante su intervención criticó la idea errónea de Kipling de que Oriente y Occidente nunca se encontrarían, pues la relación entre ellos es intensa y muy atractiva. Es cierto, matizó, que la India regala mucho a Europa pero no ha recibido un justo reconocimiento de ésta. Explicó como los contactos entre Oriente y Occidente no han cesado desde el siglo seis o siete antes de Cristo y puso de forma cronológica variados ejemplos de ello: La filosofía helenística está influenciada por los himnos Védicos. La metafísica griega por el estudio de los textos indios de los bramanes. Hay panteísmo en las teorías pitagóricas, en Platón se refleja la doctrina del Karma en ideas como el recorrido del alma en su peregrinación.
“Ese panteísmo y el concepto de transmigración de las almas persiste en los neoplatónicos como Plotino. En el Medievo también como en los Vedas se identifica el ser con el uno y se refleja en Averroes o en Ramón Llul. La consideración renacentista del mundo como representación o el mundo como teatro y la vida como sueño, pensamientos muy presentes en los libros mitológicos indios también está en la base de las principales obras de autores como Lope de Vega, Quevedo o Calderón de la Barca”.