Tal y como fue su compromiso, el Ayuntamiento de Arcos ha desvelado esta semana el informe sobre el posible desprendimiento en la peña. La delegada municipal de Seguridad Ciudadana dio a conocer el informe elaborado por la Policía Local, para concluir que no existen razones para que la población se preocupe por estos hechos que acaecieron el pasado domingo 4 de julio. El día siguiente la Policía Local y los técnicos municipales realizaron una inspección de la zona afectada mediante la utilización de un dron.
La primera conclusión es que no se trató de un vertido de escombros desde viviendas del casco antiguo como también se había sopesado inicialmente. Así, se trató de un pequeño desprendimiento, en concreto de rocas de arenisca lo que provocó la nube de polvo que fue fotografiada por algunos vecinos. La delegada González Peña insiste en que el polvo en suspensión fue muy aparatoso y que no se correspondió en ningún momento con un desprendimiento o derrumbe grave. La delegada de Seguridad ha agradecido el trabajo de la Policía local y los técnicos que han elaborado el informe.