El delegado municipal de Familia e Infancia, Francisco José Salado, y la delegada municipal de Tercera Edad, Mª Ángeles Martínez Rico, han presentado el taller ‘Enséñame a jugar’, un acto que se ha celebrado en el parque Santa Ana y en el que han estado presentes mayores de los centros y asociaciones de la ciudad, así como la representante de Teatrín, Mariló Arteche. En este espacio, se han grabado los diferentes juegos que se proyectarán en videos a los niños de primero de Primaria de los centros educativas, adaptando así la actividad a la realidad de estos momentos, por la situación de pandemia.
Este taller va destinado a promover el acercamiento de las personas mayores a la infancia, a través del mundo de los juegos, fomentando el respeto hacia las personas mayores y su cultura y creando un encuentro intergeneracional enriquecedor para ambas partes. Además, los juegos y las canciones tradicionales son parte de la cultura popular de los pueblos, por lo que su rescate y continuidad ayudarán a mantener la importancia vital de este legado cultural. También se tratará el juego como una herramienta para la educación, fomentando en la infancia el respeto hacia los demás y activando en ellos respuestas de colaboración y cooperación.
Durante el acto, Francisco José Salado ha señalado que “se trata de un taller que sirve para crear encuentros entre generaciones, integrando a abuelos y abuelas con los niños y niñas. Con este tipo de encuentros se logran valores tan importantes como el respeto hacia la figura de la persona mayor; el trabajo cooperativo con estas personas; el respeto por las normas y reglas que rigen todo tipo de juegos colectivos; o también se persigue que valoren los privilegios que tienen hoy día frente a aquellos niños y niñas de hace muchos años”. También ha reseñado que, al igual que en la iniciativa ‘Abuelos y abuelas con muchos cuentos’, “nos hemos tenido que adaptar a esta situación de pandemia, nos hemos tenido que reinventar y recurrir del mismo modo a las nuevas tecnologías para poder conseguir llegar a los más pequeños sin tener contacto directo con ellos”.
El delegado ha destacado que esta iniciativa cuenta con una valoración muy positiva por parte del profesorado de los centros educativos, “ya que este tipo de encuentros sirven para fomentar la motivación del alumnado, la imaginación o la creatividad, entre otros”. Además, ha agradecido la participación de los mayores, de los colegios locales, así como de todo el personal técnico y de la empresa Teatrín, destacando “la apuesta del Gobierno municipal para que sigan existiendo estos talleres, mejorando estas iniciativas más si cabe con las aportaciones de todas las partes que lo integran”.
Por su parte, Mª Ángeles Martínez Rico ha destacado “la gran labor que realizan los mayores de la ciudad y la buena disposición que siempre tienen a la hora de colaborar en las iniciativas que se les proponen. Da gusto trabajar con estas personas, que forman una gran familia y con talleres de este tipo se potencia la interacción social, trasladándole a los menores sus experiencias, su cultura, sus valores, sus tradiciones y sus costumbres a través de los juegos, que ellos mismos elaboran en muchas ocasiones”.
Además, Ignacia Ramos ha explicado que “grabamos juegos a los que jugábamos de pequeñas, como pueden ser la gallinita ciega, el pañuelito, las cuatro esquinas o el pachimichí. Para nosotras esto supone una maravillosa experiencia, que llevamos desarrollando muchos años y con la que queremos enseñar a los niños y niñas estos juegos. Ellos nos enseñan también mucho, porque para nosotros es algo extraordinario volver a esos años de la infancia”. También confía en “poder volver pronto a los centros y tener el contacto con los niños y niñas”.
Los objetivos principales que se quieren lograr con este taller son crear un vínculo entre las personas mayores activas de la localidad y los menores promoviendo el respeto entre ambos; recuperar canciones, juegos populares y tradicionales, y ponerlos en práctica; disfrutar del juego con iguales; desarrollar actitudes de tolerancia y respeto a través del juego; promover la actividad del juego tradicional y al aire libre, a través de la participación activa de las personas mayores, así como mostrar a las personas mayores como modelos de transmisión de valores: respeto, colaboración, cooperación o tolerancia.
Además, también se quiere activar y prevenir el deterioro cognitivo y físico de las personas mayores participantes; despertar la imaginación y fantasía de los menores introduciéndolos en diferentes formas de juego; incluir la perspectiva de género en los juegos desarrollados como una manera de educar a la población destinataria a través de la transversalidad de género; trasladar los valores del juego recreativo al espacio escolar; fomentar en las personas mayores el trabajo en equipo, la participación, la cooperación y la mejora de las relaciones entre los componentes de su grupo e implicar a las familias reforzando los valores trabajados en la actividad.
