El jerezano Rubén Pérez Herrera, que la pasada temporada dirigiera al Rayo Sanluqueño, se ha convertido en el nuevo entrenador del Cruz Roja de Jerez. Los dos equipos serán rivales en la Segunda Andaluza.
Ya hay ganas de volver a la competiciónInicia una nueva etapa en el fútbol y en este sentido resalta que “seguiré mi labor en Jerez, mi ciudad. Lo que ocurre es que no se sabe cuando empezará la próxima teporada, que pienso no será al menos hasta octubre. También se tendrá que plantear como será la categoría”.
Al igual que su hermano José, entrenador del Ibiza Pitiusas, ha estado muy ligado a Sanlúcar, perteneciendo dos temporadas al Rayo Sanluqueño y cuatro al Atlético Sanluqueño. De su estancia en el Rayo Sanluqueño sorprende al comunicar que “me ha costado el dinero dirigir al equipo y lo que me duele es que le he tenido tiempo no sólo a mi trabajo sino a mi familia. He solicitado que se me pague lo que me debe. Con lo que sí me quedo es de los buenos recuerdos que guardo de los jugadores y la amistad que me une a ellos”.
No deja de reconocer que “ya hay ganas de volver a la competición, que espero que esta temporada sea muy igualada en la Segunda Andaluza. La plantilla que tendré en el Cruz Roja está compuesta por jugadores de Jerez aunque nunca descartaremos la llegada de alguno de fuera”.
En las últimas temporadas se ha acostumbrado a sufrir para lograr los objetivos marcados: “Es lo que también le ha ocurrido a mi hermano José”.
Su último partido partido en el Rayo Sanluqueño fue en Jerez ante el San José Obrero. Derrota por 1-0 en el último minuto.