Los trabajadores transfronterizos han tenido que soportar, por vez primera desde la activación del estado de alarma a nivel nacional, colas en la Verja antes de acceder a Gibraltar. El problema es que los ciudadanos que trataban de cruzar la Verja no tenían entre ellos la suficiente distancia de seguridad entre ellos para evitar contagios.
La delegada del Gobierno de España en Andalucía, Sandra García, ha informado este jueves sobre las incidencias que se han venido produciendo por acumulación de personas en el paso aduanero de Gibraltar debido a la insistencia de familias de llevar a sus menores a centros escolares en el Peñón.
"A todos ellos se les ha disuadido de dicha posibilidad y obligado a permanecer en sus viviendas", ha explicado la delegada del Gobierno a los miembros del Comité de Coordinación de Seguridad (CECO) para coordinar los protocolos establecidos en el estado de alarma.
El portavoz del colectivo Ascteg de trabajadores españoles en Gibraltar, Juan José Uceda, confirmó las esperas, que enmarca en el mayor celo que los efectivos policiales están aplicando en la Verja a la hora de preguntar a los peatones hacia dónde y con qué propósito se dirigen, y afirma que comprenden la aplicación de estas medidas y que estas puedan provocar más esperas. Por lo que sí se siente preocupado es por la falta de esa distancia de seguridad, aunque indica que "si esta se guardase, la cola llegaría mucho más lejos", pero que deberían ser las autoridades las que garanticen que los ciudadanos cumplen con esta premisa si los ciudadanos no lo hacen de motu propio.
