La entrada y la salida del colegio La Florida ocasiona verdaderos quebraderos de cabeza a los residentes de la zona del mismo nombre y la barriada de Los Frailes, ya que para muchos de estos es la única salida del barrio, y para otros, la segunda opción, siempre dependiendo del lugar en el que tengan aparcado el vehículo.
El hecho de que muchos padres o familiares quieran llegar hasta la puerta del colegio con los coches provoca retenciones “innecesarias” que hace que, quien quiere pasar alrededor de las nueve de la mañana o las dos de la tarde por la zona se encuentre con serios problemas para pasar, llegar a su destino a tiempo, o simplemente cruzar sin tener que soportar retenciones o paradas en el tráfico que la mayor parte de las ocasiones se alargan de cinco a diez minutos.
Además, lo que molesta a aquellos que se tienen que ver perjudicados por esta situación es que los que provocan las retenciones o hacen sus paradas frente a alguna de las tres puertas del colegio lo hacen de forma impune, porque no hay ningún policía local que controle este tipo de situaciones. Por otro lado, denuncian que además se encaran con aquellos que les llaman la atención o tocan el claxon para que se disipen las retenciones o simplemente para que no se formen los atascos en el tráfico que tienen que pasar a diario.
Por ello, los residentes que tienen que hacer de la puerta del colegio su paso habitual solicitan al equipo de Gobierno que envíe a un Policía Local a esta zona de forma asidua y a diario, para controlar que los padres y familiares no ocasionen retenciones en el tráfico.
Además, por otro lado denuncian que en las últimas semanas, y sobre todo coincidiendo con el fin de semana, se han dado distintos actos vandálicos, debido a que se han producido incidentes con una de las papeleras que se encuentra situada en el frontal del colegio La Florida, que han amanecido, en distintas ocasiones, en el suelo, con los restos de basura desperdigados por la acera y la zona del aparcamiento. Por ello también solicitan que se haga una especial vigilancia para que este tipo de situaciones no se vuelvan a repetir, ya que afean la iamgen de los alrededores del colegio.