Tras muchas idas y venidas, el matrimonio Fielder-Winehouse ha llegado a su fin. Amy y Blake se casaron en mayo del 2007 tras jurarse amor eterno y con planes de futuro que incluían hasta 5 hijos en común.
Sin embargo, este jueves, dos años después de darse el 'sí quiero' convencidos de que estaban hechos el uno para el otro, la pareja ha roto su enlace para siempre.
Fue Blake quien decidió poner fin al matrimonio el pasado mes de enero, tras ver a su ex constantemente rodeada de hombres y en actitud muy cariñosa con todos ellos. En esos momentos Blake se encontraba en prisión cumpliendo una condena por tráfico y consumo de drogas, y se enteró de los escarceos de su mujer a través de la prensa.
Estando preso pidió la sentencia de divorcio bajo el argumento de que la diva del soul le fue infiel.
Según los documentos presentados ante el juez, Fielder declaró que la convivencia con la diva del soul se había vuelto "intolerable". Winehouse posteriormente reconoció haberle puesto 'los cuernos' y dijo que no se opondría a la demanda de divorcio.
En el juicio celebrado este jueves, ninguna de los dos estuvo presente. Sin embargo, el abogado de Blake mostró como prueba unos documentos en los que Amy admitía "el adulterio alegado en la petición de demanda".
Amy está completamente centrada en sus nuevos proyectos musicales que incluyen la posible grabación de un disco tras un retiro espiritual y de desintoxicación de ocho meses en la isla caribeña de Sta. Lucía.