El guardameta Roberto Jiménez dijo este jueves en su presentación como jugador del Málaga que el entrenador, José Miguel González 'Míchel', "fue decisivo" en su llegada, aunque también el director deportivo, Francesc Arnau, y la directiva malaguista que le expresaron un "interés real" por sus servicios.
Roberto, de 31 años y que llega cedido del Espanyol con una opción de compra obligatoria si el Málaga se mantiene en Primera, dijo a los periodistas que está "feliz" porque está "donde quería estar" y concienciado en que tendrá que ganarse el puesto con Andrés Prieto, con quien coincidió en el Espanyol el año pasado.
Pese a no haber jugado mucho la pasada temporada en el conjunto españolista, comentó que se encuentra en "el mejor momento" de su carrera y expresó su ilusión por ofrecer al aficionado malaguista un buen fútbol con el que disfrute.
"Engancharse al Málaga es muy fácil por muchas cosas, el clima, la ciudad, el equipo, y todos son condicionantes perfectos para crear un grupo homogéneo y compacto para ir en la misma dirección", indicó el guardameta, quien agregó que el objetivo es acercarse al nivel del Málaga de la recta final de la pasada temporada.
Entre otros asuntos, manifestó que está sorprendido por que, por vez primera, llega a un vestuario en el que es el mayor, aunque su experiencia hará, en su opinión, que tarde poco en adaptarse el nuevo grupo.
Roberto Jiménez se formó en el Atlético de Madrid y jugó en el Zaragoza, Benfica portugués y Olympiacos griego, con el que ganó tres Ligas consecutivas; antes de recalar en el Espanyol, con el que jugó cuatro partidos de Liga y dos de Copa del Rey.
