La primera dama francesa, de origen italiano, visitó ayer las ruinas de la ciudad italiana de L’Aquila, donde aseguró a los damnificados del terremoto del pasado 6 de abril: “Soy italiana y os ayudaré” y anunció que Francia reconstruirá la iglesia de las Ánimas Santas.
Por su parte, la esposa del presidente de Estados Unidos, Michelle Obama, y sus dos hijas, Malia y Sasha, quedaron “fascinadas”, que visitaron hace algunos días.
También participaron en otras actividades de diverso tipo junto a las primeras damas de otros países.