Exultante se encuentra el cine español. Esta mañana, la Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales Españoles (Fapae) se mostró pletórica y contenta ante los buenos resultados cosechados recientemente por parte de nuestro celuloide.
Y los motivos de esta felicidad no son para menos. Unos 18 millones de espectadores se han contabilizado en el año 2015, frente a 9,1 millones de hace 25 años, en 1991, cuando nació Fapae, que además está este 2016 de celebración.
El presidente de Fapae, Ramón Colom, ha aprovechado el Festival de Málaga Cine Español para poner de manifiesto la buena salud que atraviesa la industria, la cual ha multiplicado por cinco el número de productoras activas en los últimos 25 años y se han triplicado el número de coproducciones internacionales.
Colom ha subrayado el mantenimiento de la misma cuota de pantalla en los primeros tres meses de 2016 que al final del año pasado, un 19 por ciento. Esta mejoría de la percepción de nuestro celuloide viene refrendado con los exitosos estrenos de Toro, que se coloca en segundo lugar dentro del ránking de taquilla, junto a otros estrenos como Palmeras en la nieve y Cien años de perdón.
Todos estos ingredientes hacen que el sector cinematográfico haya pedido salir de los Presupuestos Generales del Estado, en pro de fórmulas de la industria, como el céntimo cultural, el céntimo de las entradas o la cuota ya impuesta en Cataluña.
“No queremos tener que ir a ver al ministro de Hacienda para explicarles cada vez que el dinero que hay es poco. Queremos salirnos de los Presupuestos Generales del Estado, el cine tiene que financiarse con el cine, como Francia, Italia o Alemania”, ha dicho.