A excepción del alivio para la vista que suponen los dibujos en las paredes, el resto del paisaje que ofrece el entorno del antiguo mercado del Carmen es dañino, con una crónica apariencia de ciudad abandonada y un servicio para la ciudadanía que se limita a bolsa de aparcamientos y solares ‘recogemierdas’.
En 2001, el Gobierno municipal liderado por Pedro Rodríguez y con Francisco Moro al frente de la Gerencia de Urbanismo, redactó un Plan Especial de Reforma Interior (PERI) del que sólo ha tomado forma la demolición del viejo mercado. Años después, Rodríguez se sacó de la manga el proyecto de una plaza porticada que quedó en eso, un proyecto. Y la realidad es que en pleno corazón de la ciudad lo que se ve es para cerrar los ojos.
Ahora, el nuevo equipo de Gobierno, con Manuel Gómez como edil de Urbanismo, trabaja en la modificación de ese PERI, y mientras el nuevo documento va tomando forma, la actuación más inminente que se va a llevar a cabo en el espacio es la demolición de los dos edificios que aún quedan en pie en la parte de la calle Duque de la Victoria que linda con el espacio que ocupaba el mercado. Según indicó Gómez a Viva Huelva, este derribo se llevará a cabo dentro de aproximadamente un mes y el coste del mismo lo asumirán los propietarios de las parcelas. Así, de aquí a nada el lateral de lo que era el mercado del Carmen será un enorme solar baldío a la espera de actuaciones que le den vida y utilidad al espacio.
En este punto, Manuel Gómez indica que, totalmente desechado el invento porticado de Pedro Rodríguez, una vez que el PERI esté modificado (“seguro que antes de que acabe este mandato, el desarrollo posterior depende de terceros”) la idea es que el lugar que ahora mismo sirve para aparcar se convierta en una plaza pública y que los coches se aparquen debajo en un parking subterráneo.
Mientras, desde el Ayuntamiento se han acometido ciertas actuaciones relacionadas con la luminosidad y la higiene de la zona, y se ha pedido a los propietarios de los diferentes solares que los vallen. En cuanto a qué uso se dará a los solares, Gómez responde: “Eso dependerá de la iniciativa privada”.
Calle las Bocas
Avanzando por Duque de la Victoria dirección centro y girando a la derecha al llegar a la calle las Bocas, el paisaje arquitectónico de la zona ‘regala’ a los viandantes desde hace ya demasiados años la imagen del esqueleto de un edificio que fue a ser y nunca llegó a serlo. Otro esperpento en pleno centro. Pero parece que el esqueleto se va a transformar. Según dijo el concejal de Urbanismo a este periódico, “hay promotores interesados en retomar las obras” y que ese edificio tenga utilidad para la ciudadanía.
Las intenciones están sobre la mesa, la modificación del PERI que sólo sirvió para derribar el antiguo mercado está en marcha, y ahora toca esperar a que más pronto que tarde la zona empiece a tener una imagen y un uso dignos en una ciudad que no puede permitir por mucho más tiempo un espacio tan nefasto en su casco histórico.