El equipo de Mestalla se clasificará con un empate para la próxima edición de la Liga de Europa, nuevo formato competitivo que sustituye a la Copa de la UEFA, aunque puede hacerlo con una derrota si el Deportivo no es capaz de derrotar en Riazor al Barcelona.
El Athletic, por su parte, regresa al escenario de la final de la Copa del Rey disputada hace tres semanas, en la que pese al gran apoyo de su afición cayó derrotado ante el Barcelona.
Ahora, el conjunto vasco llega a Valencia en una situación muy diferente, pues este encuentro nada tendrá que ver ni en ambiente ni en motivación con el del pasado día 13.
Por lo que al Valencia se refiere, el equipo llega con las fuerzas justas y con bajas, entre las que destacan las de Juan Mata, sancionado para este partido, y David Silva, lesionado desde hace algunas semanas.
Para los de Joaquín Caparrós la principal motivación será endulzar la despedida a una afición que sólo ha recibido decepciones, en forma de derrotas ante Espanyol (1-0) y Atlético (1-4), después de ver a su equipo en la final de Copa arrollado por los azulgranas.