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Martes 19/11/2024
 

Almería

Condenan a una pitonisa por intentar extorsionar al cura de Tíjola con fotos "comprometidas"

La juez impone a la acusada una pena de nueve meses de prisión por un delito de extorsión en grado de tentativa y absuelve a su marido y su hijo al no haber quedado acreditada durante el acto de juicio la participación de ambos

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El Juzgado de lo Penal número 2 de Almería ha condenado a la propietaria de una empresa de servicios esotéricos por intentar extorsionar al párroco de la localidad almeriense de Tíjola con unas fotos "comprometidas" en las que supuestamente el cura aparecía en una actitud "indecorosa" con una feligresa, lo que a la postre resultó ser falso.

   La juez impone a la acusada una pena de nueve meses de prisión por un delito de extorsión en grado de tentativa y absuelve a su marido y su hijo al no haber quedado acreditada durante el acto de juicio la participación de ambos, según indica el fallo consultado por Europa Press.

   Los hechos tuvieron lugar en noviembre de 2009 cuando A.S.S., de 54 años y vecina de Girona, telefoneó en varias ocasiones al párroco desde su residencia habitual y desde una de las líneas del consultorio esotérico para manifestarle que contaba con varias instantáneas "comprometidas" y que las iba a "hacer públicas" si no le daba 18.000 euros; un ingreso que no se llegó a producir.

   En este sentido, la mujer insistió a lo largo de los días diciéndole que "él ya sabía cómo funcionaba eso, que se pide un dinero y se paga", puesto que, en caso contrario, "iba a llamar al obispo" para revelarle las supuestas fotografías. Así, la acusada llegó a proporcionar un número de cuenta, vinculado a una empresa de su hijo, para que el cura efectuara la transferencia.

   Pese a estas exigencias, el sacerdote no consintió las exigencias de la acusada, puesto que sabía de la falsedad de sus declaraciones, y denunció los hechos ante la policía. En esta línea, durante el acto de juicio, la mujer cayó en distintas contradicciones sobre haber telefoneado o hablado con el párroco e incluso de haberle hablado de unas fotos "comprometidas" o no.

   Por el contrario, la declaración del afectado fue "mucho más sólida" y coherente ante los hechos denunciados, ya que la situación que vivió "en nada le reportó beneficios" puesto que, al contrario, "le causó bastantes más perjuicios contra su honor y con respecto a su forma de vida". Contra el fallo cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial.

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