Pasó la Semana Santa de 2015 y es hora de hacer balances. El presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías de Cádiz, Martín José García, señaló que todo "se ha desarrollado conforme a lo previsto, con los problemas domésticos de todos los años, aunque lógicamente todo es suceptible de mejora”. García indicó que el Consejo consiguió vender un alto porcentaje de sillas de la Carrera Oficial, lo que tendrá una repercusión directa en la economía de las hermandades.
El presidente del Consejo descartó que en las próximas semanas se aborde el problema de acomplamientos que existe en varias jornadas de la Semana Santa. “Ahora es tiempo de hacer balance y de preparar todo lo relacionado con las Glorias. Las cosas se tienen que meditar y nunca ha faltado el diálogo. Lógicamente el tema de la Madrugada está ahí y habrá que abordarlo, siempre respetando la voluntad de las hermandades”.
En este sentido, Martín José García avanzó que la Permanente va a respetar la voluntad de los hermanos del Perdón que quieren seguir saliendo a las tres de la madrugada del Viernes Santo, “de hecho, no sé de dónde ha salido lo del tan cacareado decreto que la iba a obligar a salir antes”.
El presidente del órgano cofrade también se refirió a los abucheos sufridos por la junta de gobierno de la Hermandad del Nazareno por la decisión de no pasar este año por la calle Botica. “El hermano mayor lo ha pasado realmente mal, y hemos estado todos con él. Creo que este tema se ha sobredimensionado y, en cualquier caso, me parece lamentable la actitud por parte de esas personas que no tuvieron reparos en abuchear a la cofradía”, señaló.
Precisamente, los silbidos y gritos hacia la Hermandad del Despojado por parte de un familiar de un miembro de la Permanente ha provocado que éste presentase su dimisión el mismo Lunes Santo. El presidente del Consejo prefirió no dar más detalles al respecto y no realizar valoración alguna sobre lo sucedido, tal sólo se limitó a decir que se trata de temas internos del Consejo, y que respeta la postura de este compañero que siempre ha trabajado por el bien de las cofradías y ha cumplido con lo que se le pedía. “Las razones que han provocado su dismisión son ajenas a su voluntad; él ha entendido que tenía que dimitir y nosotros hemos respetado su postura”, zanjó.
