La Guardia Civil de Cádiz ha dado a conocer los resultados de la operación ‘Muscle’ en la que se ha puesto a disposición judicial a un total de 25 personas por su supuesta implicación en la retirada de forma ilegal de medicamentos cuyos principios activos estimulan el crecimiento muscular.
La operación se inició cuando los agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de Cádiz tuvieron conocimiento, a través de la Inspección de Farmacia de la Delegación Territorial de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía en Cádiz, de unas supuestas irregularidades en la retirada de un grupo de medicamentos que se prescribe para estimular el crecimiento muscular, utilizado por algunas personas para obtener de forma rápida e ilegal una mejora en el rendimiento deportivo, utilizándose incluso recetas falsificadas para su retirada.
Entre los imputados en esta operación, desarrollada en las localidades de El Puerto de Santa María, Puerto real, Sanlúcar de Barrameda, San Fernando y La Línea de la Concepción, se encuentran 14 médicos, 1 celador de hospital, 1 auxiliar de farmacia, 1 funcionario municipal y 8 particulares. En concreto, en Sanlúcar han sido imputados un médico del centro de salud del Barrio Bajo, ubicado en la Calzada, y dos jóvenes.
La investigación llevada a cabo por los agentes de la Guardia Civil concluyó que en este centro de salud un médico prescribía de forma sistemática estos medicamentos a un paciente, al parecer, para tratar una difunción eréctil. Según ha informado la Benemérita, era la esposa del este quien acudía a la consulta diciendo que su marido padecía una patología urológica y que se lo había recomendado el especialista. Los guardias civiles determinaron que esta circunstancia era falsa, ya que precisamente, el paciente padecía una hiperplasia prostática, para lo que el medicamente recetado por el médico imputado, estaba claramente contraindicado, provocando incluso la inflamación de este órgano.
Finalmente pudieron concluir que la esposa acudía al médico a obtener las recetas para dárselas a sus hijos, dos jóvenes de 23 y 30 años de edad que utilizaban los anabolizantes para su propio entrenamiento muscular y para comercializar el resto de ellos en un gimnasio, llegando a obtener 213 envases. Los jóvenes han sido imputados y los padres también han sido detenidos como consecuencia de esta investigación.
Además de en Sanlúcar, la Guardia Civil ha llevado a cabo investigaciones en otras cinco localidades de la provincia. Como resultado de estas actuaciones se han puesto a disposición de los juzgados competentes a un total de 25 personas en calidad de detenidos e imputados, todos ellos como presuntos autores de los delitos de dopaje en el deporte, contra la salud pública, estafa a la Seguridad Social y falsedad documental.