La ópera La Cenerentola, melodrama jocoso en dos actos de Gioacchino Rossini (1792-1868), sobre librero de Jacopo Ferretti, se representará en el Teatro de la Maestranza los días 14, 17, 19 y 22 febrero. Se trata de una producción del Teatro San Carlo de Nápoles, con dirección de escena de Paul Curran y dirección musical de Giacomo Sagripanti, que congrega a un gran cartel de voces rossinianas como Marianna Pizzolato, Edgardo Rocha, Carlos Chausson, Borja Quiza o Mercedes Arcuri.
El director artístico del Maestranza, Pedro Halffter, ha destacado que esta ópera, estrenada en el Teatro Valle de Roma el 25 de enero de 1817, bajo la dirección del propio Rossini, supone “una escritura viva, fresca y llena de humor”, lo que la convierte en una de las piezas “más dentro del gusto del público”. En este sentido, Sagripanti -que debuta en España- ha subrayado que “musicalmente es una de las óperas más conocidas”, al tiempo que resalta que “la música siempre es el primer concepto del teatro” del compositor italiano, quien en La Cenerentola “describe de la mejor manera el sentido del abstracto”.
Por su parte, la mezzosoprano Marianna Pizzolato -Cenicienta- ha resaltado que La Cenerentola “tiene de todo vocalmente hablando, una parte baja y grave, que representa la humanidad, y cuando se da cuenta de que puede haber algo importante en su vida sube, hasta el momento final que es una explosión de alegría”. Al hilo de esto, el tenor Edgardo Rocha -Don Ramiro- afirma que esta ópera “deja un mensaje de valores, ya que a pesar del poder del príncipe, éste elige la simplicidad y humildad de Cenerentola”.
De otro lado, el bajo-barítono Carlos Chausson, que interpreta a Don Magnífico -Rossini sustituye a la tópica madrastra por un nuevo padrastro, por uno de sus mejores personajes bufos- ha explicado que en su papel de “malo” transmite “esa pobreza de espíritu de una aristocracia decadente a la que ridiculiza y que ve en la boda de sus hijas la solución de su futuro”.
Junto a las voces ya citadas, en La Cenerentola, que ya se representó en el coliseo sevillano en la temporada 1999-2000, estarán también el Coro de la Asociación de Amigos del Teatro de la Maestranza, dirigido por Iñigo Sampil, y, en el foso, la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla. Además, compartirán escenario con la mezzosoprano Anna Tobella, y el bajo-barítono Wojtek Gierlach.
La escenografía está a cargo de Pasquale Grossi, el vestuario es de Zaira de Vicentiis, la iluminación de Juan Manuel Guerra, y reposición de la puesta en escena de Oscar Cecchi.
Las funciones tendrán lugar el viernes 14, lunes 17, miércoles 19 y sábado 22 de febrero a las 20.30 horas. Las entradas tienen un precio entre 108 y 44 euros.
