Los trabajadores del astillero de Navantia de Puerto Real (Cádiz) se han volcado en apoyar a los ocho jóvenes encarcelados el pasado viernes por causar destrozos en el puente de acceso a Cádiz durante una de sus movilizaciones, una medida que ha sido ya recurrida ante el juzgado.
Los ocho jóvenes, junto a otros dos que fueron también detenidos y a los que el juez dejó en libertad con cargos, son familiares de operarios de Navantia y están actualmente en paro después de haber tenido en algún momento trabajo en la industria auxiliar naval, que sufre la escasez de carga de trabajo en el astillero público, según fuentes del mismo.
Por esta situación, los trabajadores del astillero de Navantia en Puerto Real creen que la actuación de estos diez jóvenes vecinos de la localidad debe ser enmarcada dentro de la incertidumbre que se vive en la zona ante la falta de trabajo en la factoría, principal motor de empleo de la zona, y por la que los operarios llevan años movilizándose.
Los operarios de Navantia han ofrecido a los familiares de los encarcelados el apoyo de un abogado, que ha recurrido el auto por el que el juez les envió el pasado viernes por la noche a prisión acusados de los delitos de desórdenes públicos, daños y contra la seguridad vial por los destrozos que cometieron en el puente y que obligaron a cerrar la circulación en este punto durante dieciocho horas.
Mientras se resuelve esta situación, los familiares de los ocho jóvenes presos continúan con sus acciones para visibilizar su protesta ante lo que consideran una medida judicial desproporcionada.
Así hoy, junto con representantes de los trabajadores de Navantia, acudirán a otra manifestación de otro conflicto laboral que se vive en la Bahía de Cádiz, el que afecta a los trabajadores de la empresa de sistemas informáticos Sadiel, de El Puerto de Santa María.
La alcaldesa de Puerto Real, Maribel Peinado (PA), se ha reunido tanto ayer como hoy con los padres de los jóvenes encarcelados, que le han trasladado su preocupación.
