El sindicato CSI-F en Málaga ha criticado este martes que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) está negando actualmente las licencias por riesgo en el embarazo del personal sanitario en la provincia.
En un comunicado, este sindicato ha advertido de que "no se están llevando a cabo" las validaciones necesarias para la concesión de este permiso laboral y que el INSS está "denegando como norma" todas las solicitudes que recibe ya validadas por la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales.
"Es decir, tras cotejarse los informes laborales favorables y sin tratar con el solicitante, tres médicos notifican que no existe riesgo aparente en el puesto de trabajo y la solicitante debe continuar con su actividad", prosiguen en su queja.
CSI-F ha mostrado así su "sospecha" por que este nuevo ajuste "pueda deberse también a un fin economicista en el sistema sanitario malagueño, que, una vez más, se ceba con los profesionales".
Además, ha subrayado que en 2011 "se registraron en la provincia varios abortos de trabajadoras del SAS". Pese a que no se pudo demostrar que el factor causal fuera laboral, "sí quedó patente el riesgo derivado de mantener a profesionales con cargas de trabajo cada vez más elevadas".
Por ello, ha lamentado que, con la reducción de presupuesto para contrataciones, "se ha incrementado el riesgo para las embarazadas, que soportan más horas de pie y tienen mayor exposición a radiaciones y contagios".
Finalmente, este sindicato ha contrapuesto que, "aunque hace algunos años las bajas por riesgo de embarazo se concedían en su totalidad, el riesgo sigue siendo el mismo, si no mayor". Así, ha defendido que "si se llevaran a cabo valoraciones psicosociales en las unidades quedaría más que demostrado el alto porcentaje de estrés laboral que sufren los trabajadores, sobre todo las embarazadas".