Las estadísticas del desempleo y de las economías familiares empeoran cada día. La situación reclama la unión de todos los esfuerzos en la mejora de la economía. Y sin entender este contexto social, la actitud del alcalde del PP en Algeciras, el señor Landaluce, siempre buscando la confrontación con otras instituciones y cada vez con más colectivos de ciudadanos, se está convirtiendo en una nuevo obstáculo para buscar la solución a los problemas.
El Grupo Municipal Socialista exige al alcalde que deje de generar enfrentamientos y se concentre en la principal tarea que tienen hoy todos los que son responsables políticos, que es trabajar en la creación de empleo. A un día de conocerse los datos del mes de octubre, la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre de este año ofrece resultados desoladores. En la provincia de Cádiz crece la temporalidad de los empleos y aumenta el número de los parados un 14,7% con respecto al segundo trimestre del año.
El peor dato es que de los 415.000 hogares gaditanos, en 57.600 todos sus miembros activos están en paro. Los recortes y más recortes no están sirviendo más que para reducir el déficit público, pero ni crece el empleo, ni se atisban mejoras económicas, sino que el drama social se prolonga sin final.
“No solucionan nada los enfrentamientos que genera el señor Landaluce para salir en los medios de comunicación con la pretensión de distraernos, porque es la única forma de saber de él cuando está en Algeciras. El problema crece, y el gobierno local del PP sigue ensimismado en fotos que no se ocupan de la realidad, de la dura realidad que están sufriendo muchas personas que no encuentran ingresos”, señala Diego Sánchez Rull, portavoz municipal socialista.
“Es lamentable que el señor Landaluce, el mismo que respalda con su voto todas y cada una de las decisiones del Gobierno de Rajoy contra las economías familiares, pretenda sacar pecho por obras sociales, cuando los algecireños y las algecireñas necesitan un alcalde que les marque una esperanza, que les facilite el presente, no que le hable todos los días de lo malo que son zutanito y menganito”, señala Sánchez Rull
