Las 36 familias que ocupan cuatro bloques de viviendas en una glorieta situada en las inmediaciones de San Lázaro, que forman la conocida como Corrala Utopía, apelarán a organismos de la ONU para denunciar lo que consideran es una privación de un derecho fundamental como es el suministro de agua por parte del Ayuntamiento de Sevilla.
El anuncio de esta denuncia llega después de que la pasada semana la empresa municipal Emasesa cortase el suministro de agua en este inmueble, que había sido recuperado semanas antes mediante un “enganche” hecho por los mismos vecinos al servicio, y de éstos se reunieran con una representación del Ayuntamiento para tratar la cuestión del suministro.
Así, desde la Corrala Utopía lamentan en un comunicado que la actuación del Ayuntamiento con estas familias -el envío de mil bricks con agua potable a las familias y la instalación de una fuente pública en las proximidades del edificio- es “una solución indigna y propia de un país del Tercer Mundo”. Por tanto, las familias han anunciado que enviarán una carta-denuncia a las Relatorías de Vivienda y Acceso al Agua de la ONU.
Asimismo, como acto de protesta, tienen previsto realizar este martes un “acto de inauguración oficial” de la fuente colocada en las inmediaciones del bloque, que consistirá en que un “doble” del alcalde Juan Ignacio Zoido colocará sobre la misma una placa con el nombre de la “Fuente de la Mentira y el Cinismo”.
En torno a una veintena de colectivos y organizaciones sociales presentarán además un manifiesto público en el que se condena la actitud del Ayuntamiento y en el que se exige a Juan Ignacio Zoido que devuelva el suministro de agua a la Corrala Utopía.
Por su parte, desde Emasesa aseguran no poder ofrecer servicio a este inmueble por “carecer de autorización de propiedad”, un requisito necesario para cumplir lo que establece en el Reglamento del Suministro Domiciliario del Agua de la Junta, según aseguran.
Del mismo modo, el consejero delegado de Emasesa, Jesús Maza, ha asegurado que se ha “contactado con la propiedad del inmueble, una sociedad del grupo Ibercaja, y su delegado territorial nos ha manifestado verbalmente que tienen puesta una denuncia contra la ocupación y que, por tanto, la propiedad no autorizaba ningún suministro de agua”.
