A 80 céntimos de euro el porte, siempre y cuando no pese más de 20 kilos, porque es el peso máximo que aguanta el soporte de carga anclado a una bicicleta que se ha convertido en su particular compañera por las calles de Ronda.
Con 34 años, desempleado, este licenciado en mercado y psicología ha puesto en marcha un proyecto, a tenor, sencillo, donde la mayor dificultad radica en las propias calles de Ronda, que le convertirán en un auténtico deportista de fondo de salir adelante su proyecto emprendedor.
Cansado de la crisis, José Manuel Pimentel decidió la creación de un servicio de mensajería en bicicleta, lo que permite trasladar a cualquier punto de la ciudad cartas, pequeños paquetes o cestas de alimentos, siempre que no sobrepase esos kilos máximos. Algunas empresas locales ya han confiado en él, y también algunos particulares, especialmente ancianos que no pueden cargar con la cesta de la compra. Para ello, Pimentel ha creado unos bonos de 12 euros que dan derecho a 15 portes: "Es una idea ante el desempleo, y está teniendo aceptación", reconocía Pimentel durante la presentación de su idea de manos del concejal de Medio Ambiente, Rafael Flores, que ha querido apoyar a este rondeño "por poner en marcha un proyecto que contribuye a conservar nuestro entorno, porque la bicicleta es un sistema de transporte sostenible", recordaba Flores.
La idea contempla también la colocación de anuncios publicitarios en el soporte de carga anclado a la bicicleta.
