En un veredicto hecho público en la tarde de este jueves, el jurado ha considerado culpable al imputado y ha considerado probado que la golpeó con un cubo lleno de agua hasta en cinco ocasiones "con el ánimo de lesionarla, pero no de matarla", y que la muerte se produjo después de que, a consecuencia de los golpes recibidos, la mujer cayera al canal y falleciera ahogada, han apuntado las mismas fuentes consultadas.
Tras el veredicto del jurado, tanto las acusaciones como la abogada de la defensa han rebajado sus peticiones iniciales de pena, que eran de 12 años y medio de cárcel por un delito de homicidio. De esta forma, la Fiscalía, la acusación particular y los letrados del Estado y de la Junta de Andalucía han pedido para el encartado cuatro años por un delito de homicidio imprudente y cinco años por un delito de lesiones, mientras que la letrada de la defensa ha solicitado cinco años de prisión por un delito de lesiones en concurso ideal con un delito de homicidio imprudente.
Durante la vista oral, el procesado relató que el día de los hechos, el 1 de julio de 2009, volvía de colocar la mirilla a una puerta cuando se encontró con su pareja y decidieron ir a recoger patatas. Una vez habían recogido "unos seis o siete kilos de patatas", se dirigieron ambos a coger uvas a una finca pero por el camino decidieron lavar las patatas, por lo que se bajaron del vehículo en el que iban. Una vez allí, la víctima le pidió dinero "porque quería mandárselo a su hijo" y comenzó una discusión en el transcurso de la cual la mujer habría insultado a la exmujer y a las hijas del imputado.
Por ese motivo, y según su relato, cogió el cubo y golpeó con el mismo en dos ocasiones a la víctima, tras lo que ésta cayó al canal de los Presos. "Intenté socorrerla, pero la corriente se la llevó y no pude; la vi flotando durante 12 ó 14 metros, pero la corriente era muy fuerte y se la llevó hacia el centro", apostilló, añadiendo que, tras ello, "yo sabía que estaba ahogada, por lo que perdí el sentido, no sabía dónde estaba" y se dirigió a su casa, tardando "tres horas" en cubrir una distancia de ocho kilómetros.
Según relata el Ministerio Público en su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos ocurrieron en la mañana del día 1 de julio de 2009, cuando el acusado, A.D.M., y la víctima, I.P.C., salieron temprano a coger patatas a bordo de un vehículo propiedad del procesado, parándose para ello en el arcén de la SE-9024, aproximadamente a un kilómetro del Parque de la Corchuela.
LOS HECHOS
Así, y tras recoger dos cubos, decidieron ambos ir a recoger uvas, adentrándose con tal finalidad en el carril llamado 'Colada de la Platera', camino que atraviesa el canal del bajo Guadalquivir. Al llegar al puente que atraviesa este canal, decidieron lavar las patatas que habían recogido, por lo que se bajaron del vehículo en el que viajaban.
En ese momento, auxiliado por un cubo de zinc al que ató un cinturón, el imputado se dispuso a sacar agua del canal tumbándose para ello al borde del mismo. En ese lugar, surgió una discusión entre ambos por motivos "no suficientemente aclarados" en el transcurso de la cual el procesado, "en un estado de gran agresividad" y teniendo el cubo lleno de agua en sus manos, lo lanzó contra la cabeza de su pareja "con gran violencia" en "repetidas" ocasiones, "aceptando que con tal acción podía acabar con su vida".
Tras ello, la víctima cayó al canal a causa de los golpes, falleciendo por sumersión instantes después. Hay que recordar que el cuerpo de la víctima fue hallado sobre las 21,00 horas del mismo día 1 de julio en la esclusa del Canal de Los Presos, en el término municipal de Los Palacios y Villafranca, aunque la detención del presunto homicida, que se encuentra en prisión, no se practicó hasta el día 7 de julio por parte de agentes de la Guardia Civil.
