Esta afirmación es para García Mellado “un apoyo tácito a la tasa de congestión que viene planteando nuestro Ayuntamiento ante las colas de vehículos que se forman para entrar a Gibraltar, acceso que acarrea altas concentraciones de vehículos y, por consiguiente, contaminación”.
Añade la edil que “esperamos que esta afirmación de la Secretaria de Estado sirva para que otros dirigentes socialistas, fundamentalmente el diputado socialista Salvador de la Encina, recapaciten y contemplen como beneficioso los planteamientos realizados por nuestro alcalde, a quien los socialistas no le han dado la más mínima posibilidad con este asunto”.
Para García Mellado “es altamente incongruente para los socialistas que la Secretaria de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino apueste para que los ayuntamientos españoles comiencen a tomar medida ante lo que considera el primer foco de contaminación ambiental, y que nosotros hemos emprendido pero nos encontramos delante a todo el aparato del PSOE e incluso a los abogados del Estado gracias a los absurdos esfuerzos del diputado De la Encina, quien nuevamente y en el espacio de dos días recibe de esta manera, tras el tema del parque, otro varapalo”.
Extrae la concejal de la indicada entrevista del rotativo algunas expresiones de Teresa Ribera que, a su juicio, es un apoyo sin ambages al alcalde de La Línea: Ante la pregunta de si habría que restringir el tráfico, contesta la Secretaria de Estado sin rodeos indicando que “la Ley de Calidad del Aire permite tomar esa medida. El tráfico es determinante y la principal responsabilidad es de los ayuntamientos. Deben avanzar en esa dirección”.
Por todo ello, anuncia la concejal que se remitirá a la Secretaria de Estado de Cambio Climático un dossier sobre la incidencia de las colas de vehículos para acceder a Gibraltar, las cuales soportan exclusivamente los linenses. También un reportaje fotográfico de las caravanas de vehículos y un resumen de prensa con el rechazo que la tasa de congestión ha deparado de manera furibunda entre altos cargos socialistas.