Y entonces llegó la frase del día, o una de ellas. Cabaña le dijo que “mira si tengo gallardía que si hubiera nacido más alto sería torero”. Y claro, esa frase, el mismo día en el que un veterano dirigente socialista como José Luis Blanco soltaba en un diario provincial que Cabaña “no tiene ni educación, ni gallardía”, resonó en todo el Salón Regio como un golpe de autoridad y una lanza hacia su compañero en el PSOE gaditano.
También curioso fue el debate alrededor de la propuesta del PP en defensa de los toros. Los cuernos salieron a escena e incluso aficionados taurinos reconocidos como José Antonio Barroso dijo que la exposición de motivos de la moción tenía “un tufillo casposo y rancio”. Y eso que él iba a votar a favor de la propuesta del PP mientras que su compañero de IU, Antonio Roldán, tenía previsto hacerlo en contra.
Al final ambos votaron en contra porque el PP no quiso dividir la propuesta y mantuvo el tercer punto, que no apoyó tampoco el PSOE. Cabaña recordó que él estaba acostumbrado a “ver ganado”.
La propuesta también nos dejó una imagen, enfatizada por el propio protagonista como es la de Barroso, “pasando por taquilla y no de gañote”, en el coso de El Puerto de Santa María, con puro cubano “pero sin sombrero”.