El grupo radical islámico Al Shabab, ligado a Al Qaeda, asumió los ataques en un mensaje en su página web y recalcó que estaban dirigidos contra las fuerzas de la Amisom, compuestas por soldados de Uganda y Burundi, que respaldan al Gobierno Federal de Transición.
Este atentado se produce tras 26 días de ataques ininterrumpidos de Al Shabab contra las tropas del Gobierno Federal de Transición, respaldado por la comunidad internacional, y de la Amisom en Mogadiscio, donde han muerto más de 250 personas y han huido más de 23.000 habitantes, según fuentes locales y de la ONU.
Ante estos ataques, la milicia islámica somalí de Al Shabab afirmó que la lucha que lleva a cabo en Somalia es para crear un estado musulmán radical y responde a una “guerra entre el Corán y la Biblia”, en respuesta al plan de un pastor cristiano de EEUU de quemar el libro del Islám.
Durante una alocución a los asistentes a la oración de la noche del miércoles en una mezquita de Mogadiscio, Fuad Mohamed Khalaf, el tercero al mando de Al Shabab, dijo que, “al planear el Día de quemar el Corán en Estados Unidos, dejan claro que sus planes son la lucha entre la iglesia y la mezquita” y aseguró que llevarán a cabo una “dolorosa venganza” contra los occidentales.
Dirigentes religiosos y políticos de todo el mundo han condenado los planes de Jones, entre ellos el presidente de EEUU, Barack Obama, quien calificó como “un acto destructivo” la quema de copias del Corán y dijo que podría provocar “gran violencia”.
Terry Jones, pastor de la iglesia Dove World Outreach, ha reiterado que no cejará en su plan de quemar copias del libro sagrado de Islam mañana sábado, cuando se cumpla el noveno aniversario de los ataques terroristas contra Estados Unidos.