“La operación Libertad Iraquí se ha terminado, pero el compromiso de Estados Unidos con Irak continuará con la misión que comienza hoy, la operación Nuevo Amanecer”, dijo Biden durante la ceremonia celebrada en la principal base militar estadounidense Camp Victory, en las afueras de Bagdad.
Libertad Iraquí se inició con la invasión estadounidense de Irak, en marzo de 2003, y culminó formalmente el martes, aunque el último batallón de combate de EEUU abandonó el país el pasado 19 de agosto.
Con la nueva misión que comenzó ayer también hubo un cambio en el mando militar estadounidense, que se materializó en la ceremonia con el relevo del hasta ahora jefe del Ejército de EEUU en Irak, general Ray Odierno, por el general Lloyd Austin.
Austin estará a la cabeza de los menos de 50.000 uniformados estadounidenses que quedan en Irak y que se dedicarán a tareas de adiestramiento y formación hasta su repliegue, a finales de 2011, de acuerdo con el pacto de seguridad firmado entre ambos países en diciembre de 2008.
Biden matizó que la ceremonia del martes “no sólo supone un cambio de mando, sino el comienzo de un nuevo capítulo en las relaciones con Irak”.
“Nuestro objetivo no es sólo lograr la seguridad de Irak y su prosperidad económica y estabilidad, sino que esperamos desarrollar los lazos comerciales, culturales y educativos”.
Además de Biden y responsables militares de EEUU e Irak, al acto acudieron el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates.