El expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) tildó este viernes de izquierdista "súper radical" al fiscal especial designado por el Gobierno para investigar su posible implicación en el asalto al Capitolio y los documentos clasificados hallados en su residencia de Florida.
Desde un discurso pronunciado en Palm Beach (Florida, EE.UU.), el exmandatario enmarcó la designación del fiscal como el último episodio de una "caza de brujas" en su contra y lo calificó de un abuso de poder "horrible" que llega cuando él creía que la investigación sobre el asalto al Capitolio estaba "muerta".
"Esto está amañado igual que lo estuvieron las elecciones de 2020, y no podemos dejar que algo así le ocurra a nuestro país", espetó Trump a los asistentes.
En su habitual tono agresivo e insultante, Trump llamó "corrupto y drogadicto" a Hunter Biden, hijo del presidente estadounidense, Joe Biden, y subrayó la a su juicio hipocresía de que se le investigue a él y no al hijo del mandatario.
Trump ya había adelantado horas antes en una entrevista en el canal televisivo Fox News que no prevé participar en la investigación.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, anunció hoy la designación de Jack Smith como fiscal especial en una investigación que será independiente de las que ya están abiertas tanto en Florida como en el Distrito de Columbia, y aseguró que esta nueva pesquisa no retrasará las otras.
Garland admitió que ha decidido abrir esta investigación especial tras conocer las intenciones de Trump de presentarse a la reelección, así como las del presidente actual, Joe Biden, de ser también candidato en 2024.
"He concluido que es de interés público designar un fiscal especial", añadió.
La investigación sobre el asalto al Capitolio se centrará, según el fiscal general de Estados Unidos, en saber si hubo una o más personas que "interfirieron en el traspaso de poder" del país y en el proceso de certificación del resultado de las elecciones que se estaba llevando a cabo ese día, el 6 de enero de 2021.
En cuanto a Mar-a-Lago, Garland señaló que hay que investigar el manejo de los documentos clasificados que fueron allí encontrados, y averiguar también si hubo obstrucción a la justicia en estas pesquisas.
Es la segunda vez que Trump es sometido a una investigación de este tipo, ya que en 2017, el exdirector del FBI Robert Mueller fue nombrado fiscal especial para investigar la interferencia rusa en las elecciones del 2016.