El recurso contencioso-administrativo de la plataforma Bosque Urbano para frenar el concurso sobre la adjudicación de los antiguos terrenos de Repsol a un privado ha sido rechazado por el juez, por lo que el concurso para su subasta sigue adelante.
Así lo ha confirmado este miércoles el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, quien ha considerado esta noticia "muy positiva" y ha incidido en que desde el Ayuntamiento "estamos actuando en legalidad".
De hecho, el auto da la razón a la Gerencia Municipal de Urbanismo y afirma que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que se aprobó en 2011 por el Consistorio y la Junta, solo contempla el uso residencial, de terceros y aparcamientos, y no la creación de zonas verdes como plantea la plataforma Bosque Urbano, ha dicho el regidor.
Sobre este aspecto, De la Torre ha abundado que, citando de forma textual el auto, las referidas parcelas --que suman 26.000 metros cuadrados y son objeto de licitación-- "tienen un uso concreto establecido en el planeamiento sin que puedan ser destinadas a zonas verdes", por lo que "la medida cautelar interesada por la recurrente queda inoperante".
Y lo deniega toda vez que las parcelas en cuestión, bien "se unan bajo la titularidad del Ayuntamiento demandado o se enajenen a terceros licitadores, el uso de las mismas será el mismo, destinadas a usos residenciales o terciarios, y no a zonas verdes", incide.
También plantea el auto que "la línea cautelar de subvención que interesaba podría producir daños de una entidad superior que acarrearían a la comunidad las dilaciones a ejecutar el planeamiento, y eso une los daños y perjuicios que la acción de la medida cautelar ocasionaría también a terceros, como son los licitadores, así como al resto de propietarios de parcelas del sector que verían paralizado el desarrollo del mismo".
De la Torre ha explicado que esto viene a evidenciar que el Ayuntamiento "no es el único propietario", pues una parte municipal son los 26.000 metros cuadrados que se venden, pero también hay otra parte que corresponde a una entidad de la Administración central y otra parte "que ya fue adjudicada a los propietarios de Arraijanal" para que fuese un terreno libre y poder construir un parque, algo que "lógicamente también se vería afectado".
La parcela municipal salió a concurso convocado por el Ayuntamiento de Málaga con la intención de construir tres torres de viviendas y dos edificios para oficinas junto a la avenida Juan XXIII.
Ahora, tras la publicación del auto, publicado a fecha de 1 de septiembre de 2022, que deniega las medidas cautelares que solicitaba la plataforma Bosque Urbano, esta tiene la posibilidad de apelar en 15 días, ha explicado el alcalde.
Con ello, ha insistido en que "es una noticia muy positiva" y que tras ella, el Consistorio va a seguir avanzando, contando con la opinión de los licitadores, para que este proceso tenga "una seguridad jurídica máxima" y "no puede hacer nunca una repercusión negativa sobre el Ayuntamiento por cualquier tema que pudiera pasar más adelante", ha dicho.
