El portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Sevilla, Álvaro Pimentel, ha destacado este lunes que durante este año, el pleno hispalense ha aprobado 18 de las 22 mociones promovidas por su partido, el 80% del total, y 12 de ellas por unanimidad; lo que según ha defendido "demuestra que la utilidad sigue siendo la principal característica" de dicha fuerza de oposición.
"Frente a la confrontación política y a los intereses partidistas, desde Ciudadanos hemos apostado a lo largo de este año por estar al lado de los problemas reales de los sevillanos", ha indicado señalando que estas mociones estaban destinadas a "mejorar el día a día de los vecinos y a resolver algunos de los problemas históricos y enquistados".
Pimentel ha señalado que además de estas 18 mociones plenamente aprobadas, otras tres contaron con uno o varios puntos aprobados del total de aspectos propuestos, mientras que sólo una de las mociones de Cs fue rechazada por completo.
Entre las mociones aprobadas, ha destacado una que reclama "la reordenación de las paradas de la línea 43 de Tussam para acercar a los vecinos de Triana al corazón del Casco Antiguo", otra en demanda de recuperar plazas de aparcamientos eliminadas en la Carretera de Carmona, otra por la reordenación del carril bici de la calle San Jacinto, otra solicitando mejoras para la circulación de los motoristas, otra en demanda de nuevas ayudas para jóvenes o emprendedores o más actuaciones en los polígonos u otra en demanda de planes especiales en zonas como la Corza, Nervión o en el Distrito Este-Alcosa-Torreblanca.
Pero según ha alertado, "la mayoría de estas mociones aprobadas han acabado guardadas en un cajón por la peligrosa deriva del equipo de gobierno del PSOE, de no ejecutar las propuestas plenarias" de los grupos de oposición, que carecen de rango ejecutivo. "Ningunear de este modo el trabajo de los grupos (de oposición) supone una peligrosa deriva antidemocrática y un ejercicio de falta de transparencia", ha opinado.
Por eso, ha reclamado que el nuevo curso político que arrancará en septiembre implique "un cambio de rumbo" del Gobierno local del PSOE, para que el mismo ejecute los acuerdos plenarios "a la mayor brevedad posible" frente a la actual actitud de "desidia y la falta de actuación".