La primera reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Alberto Núñez Feijóo como nuevo líder del PP y de la oposición ha terminado pasadas las dos del mediodía tras más de tres horas en las que el Ejecutivo ha propuesto pactos en materia económica de política exterior o para la renovación del poder judicial.
El encuentro, que abre una nueva etapa en su relación tras el relevo de Pablo Casado como líder de los populares, ha comenzado puntual, a las 11.00 horas de este jueves, tras un saludo con apretón de manos en la escalinata del Palacio de la Moncloa, donde ambos han posado ante los fotógrafos sin mascarilla, para ponérsela de nuevo para acceder al recinto. Finaliza más de tres horas después según han indicado ambas partes.
Pese a la intención de lograr un entendimiento, el punto de partida del encuentro eran recetas diferentes para hacer frente a la inflación disparada y la crisis económica agravada por la guerra en Ucrania, pues los populares reclaman bajar los impuestos, deflactando el IRPF, y recortar en gasto superfluo, mientras el Gobierno ha advertido de que "desarmar" el Estado de bienestar sería "suicida".
Sánchez ha buscado lograr once acuerdos con Feijóo, entre los que se incluyen renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) antes del 12 de junio, al igual que el Tribunal Constitucional, además de un pacto para el plan nacional de respuesta a la guerra, o el respaldo del PP a las gestiones del Gobierno en la UE para rebajar el precio de la luz o la gestión de los fondos europeos.
Sin embargo, Feijóo anunció ayer que pediría la bajada inmediata del IRPF como condición para apoyar el paquete de medidas ante la guerra, que considera un "parche" con un título "falaz" porque los problemas económicos son previos al conflicto.
El encuentro de Sánchez y Feijóo es previo a la reunión que el presidente del Gobierno mantiene también este jueves con el rey marroquí Mohamed VI cuando el PSOE se ha quedado solo en el giro respecto a la posición del Sahara al mostrar el Congreso de los Diputados, con el sí del PP, el respaldo a un referéndum en el Sahara en el marco de la ONU.
