Los cementerios sevillanos han recuperado este 1 de noviembre la imagen perdida en el 2020 por culpa de la pandemia, con la gente visitando los camposantos sin restricciones, aunque con lluvia en muchos momentos del día y mascarillas en el caso de haber acumulaciones de personas en algunos puntos.
Desde primera hora de la mañana se han podido ver en los cementerios el paisaje típico de cualquier jornada de Todos los Santos, tanto con la llegada masiva de personas como con los dispositivos de tráfico en torno a sus accesos para garantizar la seguridad, además de una incesante actividad en los puestos de venta de flores frescas, otro sector que, poco a poco, se está recuperando.
La aglomeración de personas en el cementerio de San Fernando de Sevilla, el mayor de la provincia, contrasta con la tranquilidad que se vive en pueblos pequeños, como Herrera o Aznalcóllar, donde, además, en este último se puede ver una ermita árabe, una zawiya, única en España nada más entrar a su recinto.
En el de Sevilla, con la caída de la tarde, la compañía ‘Engranajes Culturales’ vuelve a representar la obra de Zorrilla 'Don Juan Tenorio’, una original propuesta teatral que desde el 2012 han visto más de 5.000 personas.
La representación une la interpretación patrimonial con las relaciones literarias entre el amor, la muerte y los cementerios, haciendo que Don Juan y Doña Inés pisen suelo santo para transportar al público al lugar donde culminó su amor, con su muerte.
Las tumbas de Miguel Tenorio de Castilla (secretario y amante de la reina Isabel II), el pintor José Villegas Cordero, el escultor Antonio Susillo, autor del cristo de las Mieles conservado en el cementerio, Manuel García Cuesta el Espartero, Ignacio Sánchez Mejías o José Gómez Ortega, Joselito, son algunas de las que se visitan en la noche de la representación.
La jornada de mañana, día de los Fieles Difuntos, cierra la doble cita casi obligada con los camposantos, aunque esta será menos concurrida al tratarse de un día laboral.